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Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) volvieron ayer a arremeter contra los centros urbanos del país, al activar un coche bomba y un artefacto dinamitero en Arauca y Barranquilla, causando la muerte a dos policías y heridas a otras 23 personas. Pero el detalle que faltaba es que en Arauca el coche bomba explotó horas antes de la visita del presidente Alvaro Uribe a la ciudad. El estado de Arauca es el escenario de la experiencia piloto de la nueva política de seguridad del gobierno de Uribe. Un portavoz policial señaló que el automóvil, de matrícula venezolana, fue estacionado en cercanías de una escuela y un centro hospitalario. Según ese reporte, las autoridades recibieron una llamada que alertaba sobre la presencia de un automóvil sospechoso. “Cuando los policías se disponían a revisar el vehículo se produjo una explosión, que causó la muerte a dos uniformados y lesiones a varias personas que se encontraban o pasaban por el lugar”, relató el vocero de la policía en Arauca. Pese al atentado, Uribe se abstuvo de posponer su visita y viajó a la capital araucana en compañía de su ministra de Defensa, Marta Lucía Ramírez, y la cúpula militar.