Desde Corrientes

La tranquilidad de la siesta correntina permanece inmutable hasta las cinco de la tarde. Apenas algunos colaboradores de los tres candidatos a gobernador, Arturo Colombi, su primo Ricardo Colombi y Fabián Ríos, mantienen cierta actividad cuando faltan horas para las elecciones. Las pocas personas que transitan por las calles son indiferentes a la campaña electoral que inunda con pintadas los cordones de las veredas y con los tradicionales afiches las paredes. Como en otras provincias del país, ninguno de los principales postulantes parece modificar la apatía de su gente, cansada de ver cómo se mantienen inalterables sus condiciones de vida, independientemente de quién esté en el poder. Así es como hoy, en una provincia con el 40 por ciento de pobreza, los tres principales frentes políticos se confunden alentando la idea colectiva de que “son todos iguales”.

Arturo Colombi gobierna la provincia desde 2005. Ganó la elección con el Frente de Todos, en el marco de la Concertación Plural, que entonces agrupaba a kirchneristas y radicales. En aquel momento, su primo Ricardo Colombi le dejaba la posta en el cargo y asumía como diputado. En aquella foto de la victoria se podía ver al entonces ministro del Interior, Aníbal Fernández, a Ricardo y a Arturo sonriendo juntos, abrazados y felices. Habían vencido al peronista Carlos Rubín, apoyado por el caudillo local, Raúl “Tato” Romero Feris, y el ex presidente Eduardo Duhalde, que de la mano de su esposa, Hilda “Chiche” González, le disputaba el poder a Néstor Kirchner en la provincia de Buenos Aires.

Dos años después, los primos Colombi se enfrentaron duramente y Ricardo Colombi se postuló como senador provincial, renunciando a su banca de diputado, aunque todavía mantiene en su oficina la foto del día en que juró en el Congreso Nacional. El pacto habría sido la alternancia en el poder, pero “el rey Arturo” –como algunos le dicen a su primo– consiguió reformar la Constitución para permitir su reelección. Entre otros capítulos, el enfrentamiento incluyó trompadas, sillazos y piñas en una convención radical en 2007.

Ricardo Colombi se consagró gobernador en 2001, después de dos años de intervención federal en manos de los radicales Ramón Mestre y Oscar Aguad, actual titular del bloque de Diputados y procesado en aquellos años por una millonaria defraudación a la ciudad de Corrientes. Como la Constitución provincial no le permitía volver a presentarse, decidió apoyar a su primo, que se presentó acompañado por el peronista Rubén Pruyas. A mitad de mandato, el vicegobernador correntino se transformó en una suerte de Julio Cobos. En su caso hizo el camino inverso: es titular del PJ local y ahora acompaña en la fórmula al senador kirchnerista Fabián Ríos, que apuntó a diferenciarse de la historia de familias enfrentadas por el poder correntino y también a provincializar la elección.

Las contradicciones políticas de Corrientes no terminan en los primos Colombi. Los ex caudillos Tato y Pocho Romero Feris son parte de esta elección, aunque no participan personalmente. Hasta hace poco se podía escuchar al ex mandatario Raúl “Tato” Romero Feris, que gobernó la provincia desde 1993 hasta 1997, acusando a Arturo de corrupción, pero hoy las boletas de su Partido Nuevo llevan al gobernador como candidato a su reelección. Condenado a siete años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos, Tato puso a disposición del mandatario cobista lo que le queda del aparato que supo construir durante sus años en el poder.

El compañero de fórmula de Ricardo Colombi es el ex gobernador Pedro Braillard Poccard, un hombre que respondía políticamente a Tato Romero Feris y que gobernó la provincia hasta 1999, cuando la Legislatura provincial le hizo juicio político. Además, José Antonio “Pocho” Romero Feris, el primer gobernador tras el regreso de la democracia, le sumó su apoyo a Ricardo. Entre tanto revuelto local, pasa inadvertida la ausencia total de Eugenio “Nito” Artaza, a dos meses de resultar electo senador nacional por el frente Encuentro por Corrientes, que conduce Ricardo Colombi.

Los primos Colombi se referencian en las dos grandes líneas enfrentadas del radicalismo: Arturo tiene el apoyo explícito de Cobos, mientras que Ricardo cuenta con el apoyo orgánico de la UCR.