EL PAíS › LIMITES PARA INTERROGAR A UN ARREPENTIDO IRANI
Más de dos, está verboten
Por Raúl Kollmann
La Justicia alemana informó ayer que sólo permitirá que dos personas vuelvan a interrogar al llamado testigo C, un arrepentido iraní que dice que el gobierno de Teherán le dio diez millones de dólares a Carlos Menem para que éste silenciara la responsabilidad de Irán en el atentado. Esto significa que únicamente el juez Juan José Galeano y el fiscal José Barbaccia estarán el día 4 de diciembre en Alemania para interrogar a Abolgashem Mesbahi, tal el verdadero nombre de C. Ese día le exhibirán 29 fotos de ex funcionarios de la administración Menem para que el arrepentido señale –si puede– quién fue el que negoció los diez millones que luego supuestamente se depositaron a nombre del riojano en una cuenta en Suiza.
El testigo C, como buena parte de los arrepentidos, es de dudosa credibilidad, básicamente porque nunca aportó un dato cierto y preciso sobre cómo se hizo el atentado en la Argentina. No dijo, por ejemplo, dónde se armó la camioneta-bomba, quién fue el terrorista que realizó el atentado, cómo entró al país y de qué manera se ingresaron los explosivos. Lo señalado por C –un ex jefe de inteligencia iraní– es que el atentado se decidió en una reunión del gobierno de Teherán y luego aportó el dato de que hubo un funcionario menemista que negoció los diez millones de dólares para que no se siguiera adelante con las acusaciones contra el régimen de los ayatolas. Según C, el dinero se depositó en el Banco de Luxemburgo, sucursal Ginebra, a 200 metros del Hotel D’Rohm. Ese banco no existe.
La Justicia alemana, con la que colaboró en el esclarecimiento de una masacre de opositores iraníes, tiene a C bajo su custodia y aceptó que el arrepentido volviera a declarar, pero sólo ante Galeano y Barbaccia. “Resulta extraño que se tome esta medida –señaló Pablo Jacoby, abogado de los familiares agrupados en Memoria Activa– cuando por dos veces, una en Alemania y otra en México, el testigo declaró ante el juez, los fiscales y la apoderada de la DAIA, sin conocimiento de las demás querellas y defensores. El testigo de identidad reservada no tiene validez en la legislación argentina y además estamos ante un testimonio que no pudieron controlar las partes ni hacerle repreguntas. Con buen criterio, el Tribunal Oral, a diferencia del juez Galeano, está trayendo al ámbito del juicio a los testigos de identidad reservada para que las partes les pregunten libremente.” También José Manuel Ubeira, defensor del ex comisario Juan José Ribelli, salió al cruce de esta nueva audiencia que se llevará adelante en Alemania: “El testigo de identidad reservada es nulo para el derecho argentino y, además, los fiscales ya lo entrevistaron cuando dijo que Irán le pagó a Carlos Menem diez millones de dólares. ¿Qué hicieron los fiscales? Absolutamente nada. Esto es muy poco serio”.
Como se ve, la polémica está planteada. En Alemania, Galeano y Barbaccia le exhibirán a C las 29 fotografías de funcionarios menemistas y le pedirán más datos sobre la supuesta coima y el atentado. Sin embargo, algunas de las partes desconfían del juez, del fiscal y del testigo y reclaman que se les permita controlar ese testimonio.