Recién llegado de Colombia, donde ofició de mediador para que ese país y Venezuela normalizaran sus relaciones, el titular de la Unasur, Néstor Kirchner, cambió su rol al de presidente del PJ nacional para encabezar ayer un acto en la localidad bonaerense de Merlo. Allí criticó a la oposición y embistió especialmente contra el grupo de dirigentes anti K que se reunió en la casa del CEO del Grupo Clarín, Héctor Magnetto, al señalar que le “dan pena”. También tocó el tema de la seguridad, y afirmó que el Gobierno será el encargado de garantizarla a través de la inversión y le apuntó a la Justicia al reclamar que “actúe como corresponde”. Además, el ex presidente se mostró confiado en que la Corte Suprema resolverá en favor de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, que debe analizar las medidas cautelares presentadas contra la cláusula de desinversión interpuestas por conglomerados de medios. En ese marco, anunció también que el Gobierno apuntará a la “asignación universal universitaria” para ampliar el acceso a la educación.

Acompañado por el gobernador Daniel Scioli y por el intendente de Merlo, Raúl Othacehé, Kirchner se presentó en un acto partidario en una de sus habituales recorridas por los distritos de la primera sección del conurbano. En su discurso, el titular del PJ no se privó de fustigar a la oposición e hizo blanco, aunque sin nombrarlos, en Eduardo Duhalde, el senador Carlos Reutemann, el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, y en los diputados Felipe Solá y Francisco de Narváez, que mantuvieron la semana pasada una reunión con el CEO de Clarín en su domicilio. Según admitieron luego, hablaron de la estrategia para 2011.

“Me dan pena los dirigentes que van a tocar el timbre a la casa del señor Magnetto” disparó, al señalar que “en lugar de defender los intereses de todos los argentinos, lo que hacen es defender a las corporaciones, por eso van a escuchar los que les dicen que hay que hacer”, sentenció.

Kirchner también le apuntó al Acuerdo Cívico y Social (ACyS) al asegurar que “se juntaron solamente para transformarse en una máquina de impedir”. “Son los mismos que generaron las crisis, no nos olvidemos cuando vaciaron el Banco Central, cuando la desocupación llegó al 26 por ciento, la pérdida de puestos de trabajo”, enumeró. En ese sentido, profundizó su embestida al subrayar que “fracasaron porque no tuvieron una idea propia, porque fueron empleados de otros”.

Durante su mensaje ante empresarios de diversos sectores, en el teatro Merlo, al que asistieron numerosos intendentes y funcionarios nacionales, el ex presidente defendió el modelo económico y social aplicado por la actual Presidenta e inaugurado por él en 2003. También abordó la cuestión de la seguridad, un issue que luego también tocó la Presidenta al hablar en unas jornadas sobre justicia (ver aparte).

En ese sentido, Kirchner admitió que “el gobierno nacional deberá ayudar” con “mucha inversión” para evitar el aumento de la inseguridad.

“Sin caer en posiciones ultras, tenemos que ponernos firmes con inversión y funcionarios honestos y comprometidos”, señaló, al mismo tiempo que le reclamó a la dirigencia política evitar “hacer bombo” cuando ocurre un hecho delictivo. “Cuando hay políticas efectivas, la Justicia funciona, cuando se mancomunan el esfuerzo de la sociedad y la policía, no tenga ninguna duda de que triunfan la Justicia, la seguridad y la sociedad”, afirmó. El diputado agregó que la política de seguridad debe estar acompañada, además de por la generación de empleo, por “una Justicia que proceda como corresponde”, lo que “no significa quitarle garantía a nadie, sino darle a la sociedad seguridad de que quienes delinquen vayan a la cárcel”, apuntó, y concluyó que el tema de la seguridad “es un compromiso de todos”.

Sin nombrarlo, volvió a apuntar a De Narváez al aludir a uno de los ejes de campaña que el año pasado enarboló el actual diputado: “Un señor que en 2009 recorrió la provincia diciendo ‘tengo un plan’. Traémelo que se lo llevamos al gobernador” Scioli, fustigó Kirchner en forma irónica, lo que causó la risa de la concurrencia.

En otro orden, el diputado aseguró que “confía” en la “cristalidad” de la Corte para que resuelva las medidas cautelares que frenan la aplicación de la ley de medios, y que fueran interpuestas, entre otros, por el Grupo Clarín. Sin dar mayores precisiones sobre la medida, Kirchner anunció que el Gobierno irá “por la asignación universal universitaria, para que nuestros pibes puedan estudiar, ya que es necesario garantizar el acceso a la educación”, sostuvo.