Carlos Tomada y Daniel Filmus denunciaron a Mauricio Macri y Jaime Durán Barba
Imagen: Télam.

El juez Ariel Lijo allanó siete oficinas de empresas de comunicación relacionadas con las encuestas falsas que buscaban vincular al padre del candidato kirchnerista a jefe de Gobierno, Daniel Filmus, con Sergio Schoklender. “Telecom informó en la causa que lleva (el juez Ariel) Lijo que la ruta de entrada de las llamadas que formaban parte de la campaña sucia contra Filmus provenían del carrier internacional Tag Continental. Rodrigo Lugones, que actualmente se desempeña como director ejecutivo de Durán Barba y Asociados, es fundador de Tag Continental”, destacó Carlos Tomada, compañero de fórmula del senador en la conferencia de prensa que ambos dieron para denunciar el vínculo entre el asesor estrella del jefe de Gobierno, Mauricio Macri, Jaime Durán Barba, con las encuestas falsas. “Duele muchísimo que se utilicen estas herramientas para la política. Nunca imaginamos una vinculación tan directa”, aseguró Filmus, sorprendido por los allanamientos y la investigación judicial sobre la campaña sucia telefónica que denunció hace dos semanas. “Fueron Durán Barba y Macri los que utilizaron métodos e instrumentos que deben ser repudiados por todos los sectores de la sociedad”, afirmó Tomada, que leyó el currículum de Lugones de una página web de marketing político. Pero, además, Lugones tiene larga data en las filas del PRO, incluso antes de asociarse al ecuatoriano ya había trabajado para el ministro de Espacio Público, Diego Santilli, cuando era vicepresidente de la legislatura.

“¿Sabe usted que el padre de Daniel Filmus es arquitecto y uno de los principales contratistas de Sergio Schoklender? ¿Ahora que usted sabe que el padre de Filmus está involucrado con Schoklender, ¿igual lo votaría?”, preguntaba la encuesta telefónica. El papá de Filmus, Salomón, tiene 88 años y no terminó la primaria y nunca tuvo relación con el negocio de la construcción.

Filmus denunció la falsedad de las encuestas ante la Justicia el martes 5 de julio, menos de una semana antes de las elecciones del 10 de julio. El contenido de los llamados había llegado a oídos kirchneristas después de que varios conocidos e incluso algunos familiares comentaran a Filmus y sus colaboradores los llamados que recibieron en su casa.

Los allanamientos se realizaron en oficinas de empresas de comunicación que aparecían en el informe de Telecom que había solicitado la investigación judicial. En la causa –que tiene el Juzgado Nacional Electoral a cargo de la jueza María Servini de Cubría, que está de feria y es reemplazada por Lijo– se investiga el posible delito electoral que imputa “a quien induzca mediante engaño a votar de una manera o a abstenerse de votar de una manera”.

Según pudo saber Página/12, del expediente surge que los allanamientos se realizaron en las empresas desde las que habrían sido emitidos los llamados. La pesquisa solicitada a Telecom –el juez pudo determinar que se empleó un paquete de datos que vende la empresa– arrojó que dos o tres llamadas habían pasado por el carrier internacional de la empresa Tag Continental, una de las sujetas a inspección. En el tercer piso de Talcahuano 446 funciona comercialmente Tag Continental de la que Lugones se presenta como su fundador. Tag Continental se dedica a “servicios y estrategias de microtargeting para América latina”, es decir, reunir información detallada de las personas para después segmentarlas y ofrecer servicios especialmente diseñados con la información obtenida. En la misma dirección también funciona el callcenter Connectic SRL –también se allanó otra sede en Libertad al 1200, donde también funciona Durán Barba y asociados– de donde salieron la mayoría de las comunicaciones que recibieron los ciudadanos en forma de encuesta con información falsa. En uno de los allanamientos –no se pudo precisar cuál de ellos– se secuestró una computadora y un servidor con la información de las llamadas. El operativo se inició el miércoles a la noche con el retiro de la papelería y continuó ayer.

La relación del callcenter Connectic SRL –vinculado con Tag Continental– con el gobierno macrista también tiene antecedentes concretos. El año pasado la empresa se presentó como único oferente a una licitación pública “para la contratación de un servicio de sistema de llamadas automáticas con resultados georeferenciados (IVR) por el período de un año”, como lo indica el Boletín Oficial del 15 de abril del 2010. La resolución 296 está firmada por el jefe de Gabinete porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y se adjudica a la firma el servicio “por un total de pesos un millón trescientos treinta y cuatro mil ($1.334.000)”. Pero también el Gobierno de la Ciudad que conduce Macri le otorgó a Connectic SRL un subsidio para PyMES en el 2010 en el rubro Innovación, Diseño y Management. El “apoyo a la competitividad” que recibió fue de 118.100 pesos como monto total de la inversión para desarrollar “un administrador geográfico integrado al sistema actual de encuestas”, según se detalla en el catálogo de ganadores del subsidio impreso por el gobierno porteño.

El macrismo debió salir a contestar las acusaciones de Filmus y Tomada (ver aparte). Sin la presencia de Macri y en un local partidario, el jefe de Gabinete, Horacio Rodríguez Larreta, Durán Barba y el ministro de Gobierno, Marcos Peña, no se hicieron cargo de ninguna de las imputaciones y señalaron a Filmus y el kirchnerismo como los autores de una “campaña sucia”. El ecuatoriano admitió que conocía a Lugones y explicó que fue su alumno en la universidad y luego de su graduación “se asoció conmigo” en la consultora Durán Barba y Asociados. También aseguró que no tenía “nada que ver” con Tag Continental y Connectic SRL, y que no poseía “ninguna acción en ninguna empresa en Argentina”.

En la conferencia en la que Filmus y Tomada informaron las novedades de los allanamientos, el candidato del FpV se presentó junto a su padre Salomón. “Todo tiene que tener un límite, no puede ser que cualquier cosa valga para hacer política”, señaló con gesto severo el ex ministro de Educación. “Yo fui víctima de otras agresiones que ya denuncié. Fui víctima de afiches que me imputaban hechos que no se correspondían con la realidad”, recordó el senador en referencia a los carteles pegados en la vía pública firmados por agrupaciones como Proyecto Sur y el Frente de Izquierda pero que “no eran hechos por esas agrupaciones”.

“Me pregunto si esta campaña sucia no habrá sido hecha con recursos públicos”, se interrogó Tomada mientras describía la situación de la causa. “Introdujeron en la ciudadanía información falsa sobre el senador Filmus y su familia”, dijo Tomada y puntualizó que “no hubo un error, no es una casualidad, es una metodología; es el desprecio por el otro. Estamos hablando de una forma de hacer política, de una campaña organizada en la que vale cualquier cosa con tal de ganar.” Luego Filmus finalizó el encuentro leyendo párrafos del libro escrito por Durán Barba, El arte de ganar (ver aparte), y retó nuevamente a Macri al debate público al que se niega desde el inicio de la campaña electoral.