A quince años del asesinato del fotógrafo José Luis Cabezas, quien fue muerto de dos disparos en la cabeza por una banda integrada por delincuentes comunes e integrantes de la Policía Bonaerense, se realizaron varios actos en todo el país para recordar el trágico suceso ocurrido en los alrededores de la localidad bonaerense de Pinamar. El acto principal se realizó en Mar de Ajó, donde estuvo la hermana de Cabezas, Gladys, quien dijo que “el reclamo sigue siendo que no se olviden de Cabezas y que se haga justicia. Pero al mismo tiempo quiero que a José Luis se lo recuerde con alegría”.

Durante el homenaje, la hermana del reportero gráfico cuestionó la actuación judicial en el caso y enfatizó que “lo del Tribunal de Casación fue una vergüenza y una estafa, por lo cual si la Justicia en la Argentina no hace lo que es debido, deberemos ir a los tribunales internacionales. Bajar las penas por considerar que un asesinato no merece tantos años no tiene justificación”. Y al referirse al lugar donde fue hallado Cabezas, expresó: “No pensaba ir a la Cava (de Pinamar), pero la desesperación de saber que estaba todo destruido, abandonado, me decidió a ir para filmar lo que viera y dejar testimonio. Pero, oh, sorpresa, hoy (por ayer) estaba todo prolijo, arreglado. Por suerte tenemos la filmación anterior para que se vea la verdad”. En ese sentido explicó que hay una primera filmación, antes de los arreglos, hecha por Gabriel Michi, periodista y compañero de Cabezas en la revista Noticias; y una segunda filmación realizada ayer por ella y por Canal 7, complementada con fotos sacadas por reporteros de la revista en la que trabajó su hermano.

Gladys Cabezas explicó que eligieron Mar de Ajó como lugar del homenaje a su hermano porque “por un lado estamos cansados del maltrato de Pinamar, y, por otro, los hijos de José Luis nos pidieron esto, recordarlo con alegría. Los hijos ya son adultos y ven las cosas con otros ojos, con ojos propios”. Además, agradeció al periodismo en general y a la opinión pública por el apoyo que la familia recibe constantemente.

En Mar de Ajó, en el cruce de la calle Almirante Brown y la Costanera, el acto central de homenaje a Cabezas comenzó a las 17 y contó con la presencia de familiares, amigos y un numeroso público, en especial jóvenes. Fue convocado y organizado por la familia Cabezas, la FM Más de Mar de Ajó, Cultura Vallese y el Sindicato de Trabajadores de Juegos de Azar (Aleara), con la adhesión de la Asociación de Reporteros Gráficos (Argra), la revista Noticias y la agencia Télam, con la actuación de bandas de rock y –por deseo de los hijos del fotógrafo– una murga porteña.

El periodista Gabriel Michi sostuvo que el crimen contra el fotógrafo fue “el mayor atentado contra la libertad de expresión desde el retorno de la democracia”, y volvió a señalar las complicidades políticas que “intentaron trabar la investigación”. Michi insistió en destacar la sensación de “impunidad” que generó el “vergonzoso fallo” de la Cámara de Casación bonaerense, que a través de un cambio de carátula permitió que los condenados –a reclusión y a prisión perpetua– hoy estén en libertad. “Este año tiene la particularidad de que no quedaron asesinos tras las rejas porque los únicos detenidos gozan de salidas y tienen libertad condicional”, dijo. “Mantenemos el reclamo de justicia, diciendo que esta pelea no la vamos a dejar”, advirtió Michi. También lamentó que “el año pasado vimos cómo se desgarró la historia familiar porque falleció José Cabezas, el padre de José Luis, inmerso en una tristeza que nunca pudo superar desde el 25 de enero de 1997”.

Cabezas fue asesinado por una banda mixta de policías y delincuentes durante la madrugada de ese día en un camino rural de General Madariaga, tras ser capturado en el centro de Pinamar. Allí lo esposaron, le dieron dos tiros en la cabeza y lo quemaron con su auto. De acuerdo con lo que se comprobó tras las investigaciones judiciales, fue ultimado porque había fotografiado al empresario Alfredo Yabrán, cuyo rostro hasta ese momento era desconocido, pero que ya había sido denunciado por presuntas prácticas mafiosas.