Ya lanzado como candidato a senador nacional por la ciudad de Buenos Aires por Proyecto Sur para las legislativas de 2013, Fernando “Pino” Solanas empezó a rediseñar su política de alianzas. Está dispuesto a resignar las disputas que lo llevaron a la ruptura con el FAP en 2011 para recomponer en territorio porteño la alianza electoral de centroizquierda que lo catapulte al Senado y ampliar, incluso, el horizonte de coincidencias con adversarios con los que el cineasta se mostraba irreconciliable: “Hay que sumar a (Hugo) Moyano y a muchos más. Tenemos que construir una alternativa que derrote al macrismo y al gobierno nacional”, sentenció Solanas.

“Tenemos una relación fluida. Seguramente pronto habrá una reunión”, sostuvo Solanas sobre su acercamiento con el jefe de la fracción de la CGT opositora. “El 11 de octubre (la fecha fue modificada para el miércoles 10) está la marcha del CTA, que es como una marcha nuestra también, el diputado (Jorge) Cardelli es parte de la CTA. Y Moyano dio su apoyo”, agregó el cineasta para mostrar coincidencias.

Pero Solanas se mostró dispuesto a ir más allá en la relación con Moyano, cuando en una entrevista concedida a la agencia DyN lo consultaron si estaba dispuesto a sumar al camionero. “Hay que sumar a Moyano y a muchos más. Tenemos que construir una alternativa que derrote al macrismo y al gobierno nacional. El gobierno nacional les quitó el subsidio a los subtes y Macri hizo lo mismo. Y la víctima serán otra vez los trabajadores y usuarios. Que sigan así que nos regalan la ciudad”, dijo entusiasmado.

“Han pasado cosas en estos meses. Nadie se imaginaba que ocho meses después de las elecciones, Moyano iba a estar afuera y en franca oposición al gobierno nacional”, insistió Solanas, aunque consideró que “Moyano piensa en construir su propio instrumento político”.

De todas maneras, Solanas se mostró optimista con su candidatura a senador: “A nosotros nos van a apoyar sectores del peronismo, como lo hicieron en 2009. Soy el de los últimos peronistas históricos que trataron a Perón. Me respetan por peronista, en el recinto vienen y me saludan. No hay discurso en que no mencione a Perón. Una candidatura mía en una elección de este tipo va a tener apoyo de desprendimiento del peronismo, el progresismo y la izquierda independiente”.

Al mismo tiempo que acerca posiciones con el FAP e imagina otros respaldos, Solanas les puso límites a sus alianzas: “La oposición no es un partido. Nosotros no tenemos nada que ver con el PRO y esos cuatro o cinco peronistas federales que actúan con el PRO y Patricia Bullrich”, afirmó.