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“Massa es la locomotora del tren fantasma. Hay que estar atentos a los que trae atrás.” El intendente de La Matanza, Fernando Espinoza, contra el candidato del Frente Renovador, al que califica como “la expresión de la derecha” en la provincia de Buenos Aires. “Perón y Evita nunca hubieran arreglado con Macri”, completa. Como jefe del distrito bonaerense más importante, con un millón de electores, y en donde el Frente para la Victoria se impuso con holgura en las primarias, Espinoza es una de las figuras clave en esta campaña, detrás del gobernador Daniel Scioli y el primer candidato a diputado, Martín Insaurralde. “Lo más sorprendente es cómo la gente ahora lo reconoce... ya pudimos instalarlo”, se entusiasma en relación con la figura del intendente de Lomas de Zamora. Según sus cálculos, el kirchnerismo va a mejorar la performance de las PASO y se anima a vaticinar “un batacazo” y “un final abierto” el 27 de octubre.

–¿Cómo se llegaría a ese escenario?

–Nosotros tenemos una encuesta de toda la provincia en la que todavía la semana pasada había un 14 por ciento del electorado que está a favor de la gestión de CFK, a favor de la gestión de Scioli y aprueban la gestión del intendente oficialista, pero que aún votan a Massa. Quizá la mitad de eso puede ser un voto pensante, que está conforme pero busca otra cosa o abrir el juego en el Congreso. Pero la otra mitad es gente que todavía está confundida. En agosto hubo mucho voto confusión, sin dudas.

–¿Cómo se combate esa confusión?

–La única forma de trabajarlo es el casa por casa. No hay otra. Hablar con los vecinos. Nosotros tenemos tres mil militantes en la calle todos los días, recorriendo casa por casa, barrio por barrio.

–Hace unos días usted dijo que la inflación había sido una “macana” del Gobierno...

–En realidad, lo que dije es que nosotros sabemos escuchar el mensaje de las urnas, que por eso estamos profundizando las cuestiones que la gente nos marcó en la elección y que la inflación es una. Pero también es el caso de la seguridad, porque caminamos el distrito y la gente, si bien está contenta con la obra pública que se hizo y que venía esperando hace 50 años, lo que pedía era más seguridad. Así que poder generar más patrullaje, como se hizo, es muy importante. Algo similar pasa respecto del mínimo no imponible del Impuesto a las Ganancias. Ya este mes cambió el humor social. Cristina sabe interpretar lo que la gente quiere y necesita, y es cierto que la inflación siempre le pega al bolsillo del trabajador. Pero también es cierto que los argentinos volvimos a tener paritarias y siempre las paritarias superaron cualquier índice, que se está trabajando para mejorar ese índice y que también la prioridad es mantener este nivel de crecimiento y empleo.

–¿Y lo de la macana a qué se refería?

–Fue una frase que surgió en el momento. Cuando me preguntaron qué cosas había que corregir mencioné ese tema. Pero por supuesto que la inflación no es culpa del Gobierno, sino de los grandes monopolios económicos que, en una economía en crecimiento, siempre tratan de buscar mayores ganancias así, en vez de invertir para que haya más productividad.

–¿Hubo alguna novedad respecto de la agresión que sufrió en La Matanza Sergio Massa durante una recorrida?

–Inmediatamente después de que pasó eso me comuniqué con Massa, me puse a su disposición y me solidaricé. El en ese momento me comentó que le dijeron que había habido participación de un subdelegado municipal en el asunto y yo le dije que si eso era verdad, no me iba a temblar el pulso para echarlo. Ahora estamos esperando a que avance la investigación de la Justicia. En el medio, lo único que hay son operaciones de prensa.

–¿Qué opina de la baja de la edad de imputabilidad?

–Creo que Martín lo que hizo fue poner en el centro de la escena el debate sobre el régimen penal juvenil. Sabemos que hay que profundizar el trabajo en lo que se refiere a recuperar a los chicos que están fuera del sistema escolar. En La Matanza tenemos dos programas municipales que trabajan en ese sentido, para que los chicos vuelvan a la escuela o estudien en la universidad o en talleres de artes y oficios, a través de becas y contención. Más allá de los esfuerzos locales, hay que avanzar en una solución integral sobre qué hacer con esos chicos. Es algo que sería bueno se debata con todos los sectores políticos. No es un problema de partidos políticos ni un debate electoral.

–¿Cómo ve el futuro del peronismo desde el 28 de octubre?

–Después de las elecciones, la vida sigue. El peronismo tiene la responsabilidad de gobernar, el Frente para la Victoria va a seguir siendo la primera fuerza política de Argentina. Pase lo que pase, Cristina va a ser la gran conductora de este gran proyecto nacional donde el justicialismo es la columna vertebral, y pienso que lo importante es la unidad, que estemos unidos detrás de su figura. Hablo con gobernadores, intendentes y otros dirigentes y estamos trabajando a diario en eso.

–¿En ese “peronismo unido” qué rol le cabe a Massa?

–Massa claramente se fue del peronismo, armó otro partido, se hizo socio de Mauricio Macri y armaron un frente de derecha en la provincia de Buenos Aires. Ellos no defienden los intereses del pueblo trabajador sino los de las elites económicas, el establishment financiero y los terratenientes. Basta mirar la lista y con eso te das cuenta. Massa es la locomotora del tren fantasma, hay que estar atentos a los que trae atrás. Si quisiera volver al peronismo, primero debería hacer un mea culpa público, pero la verdad es que no lo veo. El no defiende las banderas históricas del justicialismo.