Con las testimoniales de María Daniel Torres, Elda Toranzo y María y Nora Spicogna cerró la semana de audiencias del juicio por la megacausa La Perla que se desarrolla en los tribunales federales de Córdoba. María y Nora Spicogna relataron las circunstancias en que fueron secuestradas violentamente en su casa el 21 de febrero de 1976, un mes antes del golpe de Estado del 24 de marzo. María tenía 25 años, era militante peronista y delegada en la Empresa Nacional de Telecomunicaciones (ENTel), en tanto su hermana Nora, de 17 años, militaba en la Unión de Estudiantes Secundarios (UES). Ambas fueron trasladadas al ex Centro Clandestino de Detención del Campo de la Ribera, donde por varios días sufrieron “torturas y vejaciones”. “Eran amorales, no tenían piedad. Su crueldad no tenía límites. Jamás pensamos que existieran personas capaces de arremeter contra la humanidad con métodos de tanta destrucción”, sostuvo María al dimensionar lo que debieron padecer en cautiverio a manos de los militares.