EL PAíS
Otro sondeo muestra un empate técnico entre los dos candidatos
Es un trabajo de Catterberg que le otorga a Ibarra una ventaja de un punto y medio por sobre Macri. Varias consultoras señalan lo mismo, siempre con el jefe de gobierno arriba.
Por Raúl Kollmann
En un cuadro de empate técnico, Aníbal Ibarra aventaja por apenas un punto y medio a su contendiente Mauricio Macri. Como esa diferencia está dentro de los cuatro puntos del error que tienen los sondeos, el diagnóstico es de empate. “La escasa distancia entre los candidatos no permite pronosticar con certeza quién será el ganador. La inclinación final de los indecisos y la decisión de quienes no votaron o votaron en blanco en la primera vuelta será decisiva para determinar el ganador del próximo domingo”, señaló Eduardo Fidanza, de la consultora Catterberg y Asociados.
Las conclusiones surgen de la última encuesta realizada precisamente por esa consultora y en la que se abarcó a 600 personas de toda la Capital Federal. Es una encuesta telefónica, en la que se respetaron las proporciones por edad, sexo y nivel económico-social.
El punto clave para entender el cuadro de situación es que el 70 por ciento de los votantes de Luis Zamora se inclinan por Ibarra para el próximo domingo, mientras que casi un diez por ciento lo hará por Macri y un 20 por ciento se inclinará por el llamado voto negativo “en blanco, anulado” o no irá a votar. Es en esa masa de votantes de Zamora que Ibarra recorta el terreno y pasa al frente.
Entre los votantes de Bullrich, la distribución es pareja, aunque con leve ventaja para Macri. O sea que cuatro de cada diez votantes de “la Piba” pasan al empresario y tres de cada diez a Ibarra.
Durante el fin de semana otros sondeos de opinión daban leves ventajas para Aníbal Ibarra: Research International-Analogías registraba tres puntos a favor del actual jefe de gobierno, OPSM, la consultora de Enrique Zuleta Puceiro, publicó la misma diferencia, e Ipsos-Mora y Araujo dio un punto de ventaja para Ibarra. En todos los casos, se trata de distancias que están dentro del margen de error de las encuestas, pero significativamente todos los estudios otorgan la ventaja al mismo candidato. En el bunker de Mauricio Macri manejan encuestas de Aresco, la empresa de Julio Aurelio, pero hasta el momento no se dio a conocer ningún resultado. De acuerdo a los rumores, en los seguimientos diarios de Aurelio se registra una leve ventaja para Macri unos días y leves ventajas para Ibarra otros días.
La estrategia desplegada por Macri en los últimos días consiste en un llamado a votar a la gente que se ausentó de las urnas en la primera vuelta. El empresario tiene estudios que demuestran que una parte de esos ausentes son sectores de menores recursos que, por la crisis, tuvieron que irse a vivir al segundo o tercer cordón del Gran Buenos Aires y también los denominados votos-country, o sea sectores de clase media alta que se trasladaron a Pilar, Escobar o las zonas de barrios cerrados del norte y el sur más rico del conurbano. Macri cree que esos votos potenciales de los sectores más ricos y más pobres pueden favorecerlo. Ibarra, por su parte, es el candidato menos rechazado y según los estudios es el que mejores chances tiene de ganarse el voto de los indecisos o de los que, por ahora, se inclinan por el voto negativo.