EL PAíS
Una apuesta transversal pero con obras públicas
Aníbal Ibarra y Alberto Fernández se reunieron ayer en la Casa Rosada. Acordaron seguir construyendo el espacio transversal de apoyo a Kirchner y fortalecer la gestión porteña desarrollando mucha obra pública en la ciudad.
Por Santiago Rodríguez
En la Casa Rosada apuestan a Aníbal Ibarra como la figura a partir de la cual construir la transversalidad con la que pretenden ampliar la base de sustentación política de Néstor Kirchner más allá de los límites del PJ. Y también están convencidos de que el modo de fortalecer el gobierno porteño es por medio de acciones y obras. Es por esa razón que el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, recibió anoche en su despacho a Ibarra y ambos acordaron trabajar en forma coordinada en ambos frentes: por un lado, volvieron a conversar sobre la alternativa de articular un espacio político que reúna a figuras del centroizquierda como el intendente rosarino Hermes Binner y el de Morón, Martín Sabbatella; por otro, definieron una agenda de gestión para la ciudad que contempla la puesta en marcha de varios proyectos.
El interés de Kirchner de que Ibarra agrupe al “conjunto de fuerzas progresistas que están al margen del peronismo” quedó de manifiesto en la reunión que ambos mantuvieron en la semana siguiente a las elecciones porteñas, en las que el santacruceño jugó a todo o nada a favor del ex fiscal en su pelea con Mauricio Macri. Fernández le reiteró ayer al jefe de gobierno las intenciones de Kirchner en ese sentido y en la conversación no sólo volvieron a mencionarse los nombres de Binner y Sabbatella, sino también el del intendente de Cipolletti, Julio Arriaga, a quien Ibarra visitará el próximo viernes con motivo del festejo del centenario de la fundación de esa ciudad rionegrina. Ambos coincidieron también en el análisis de que el triunfo de Carlos Rovira en Misiones es positivo para la transversalidad que alientan desde la Rosada.
En la Jefatura de Gobierno no ven con malos ojos el rol que Kirchner pretende hacerle jugar a Ibarra “siempre y cuando –aclaran– no cambie el rumbo que hasta ahora le ha dado a su gestión”. El ex fiscal pretende borrar en los próximos cinco meses la imagen de poco eficiente en la gestión que instaló Macri durante la campaña electoral y sabe que el Gobierno nacional lo puede ayudar a cumplir ese objetivo. Los hombres de Kirchner también saben que la Capital Federal no es una vidriera despreciable para ningún presidente y por eso Fernández e Ibarra acordaron además varios temas de gestión:
- Seguridad: La intención es fortalecer un esquema que priorice la presencia policial en las calles. En ese marco, el gobierno nacional va a asignar una partida presupuestaria para incorporar el año próximo 500 nuevos agentes a la prevención del delito y la administración porteña financiará la incorporación de otros 500 efectivos. Además, se quedó en avanzar sobre la idea de darle al jefe de gobierno mayor injerencia en el manejo de la policía en el ámbito local y que incluso pueda darle instrucciones en cuestiones propias de la ciudad, como el tránsito.
- Autopista ribereña: Se acordó la realización de una reunión entre funcionarios del Ministerio de Planificación Federal, encabezado por Julio De Vido, y miembros del gobierno porteño para empezar a establecer los pasos que se darán para la construcción de esa obra. La construcción de esa autopista –que une la Illia con la Buenos Aires-La Plata– es un viejo proyecto nunca concretado y muy polémico en lo que tiene que ver con su trazado. La ciudad determinará qué proyecto llevar adelante y la administración nacional le transferirá los fondos para su construcción.
- Edificio de Correo: La ciudad y la Nación formarán una comisión conjunta para desarrollar el proyecto de creación de un centro cultural en la vieja sede central del Correo. El inmueble pertenece al Estado nacional que descartó destinarlo para oficinas y se lo dará en comodato a la ciudad para que lo utilice con fines culturales. La idea es llamar a un concurso de proyectos con intervención de la Sociedad Central de Arquitectos.
- Subte A: El Gobierno nacional pondrá la contraparte necesaria para que el Banco Mundial libere un crédito que ya otorgó hace tiempo con el objetivo de modernizar la señalización de esa línea de subterráneos. Laciudad ya tiene en marcha el proceso de licitación para extender esa línea hasta la avenida Nazca.