El kirchnerismo expresó ayer su repudio a la agresión de Francisco de Narváez al director del portal web Nova, Mario Casalongue. Lo hizo a través de la titular de la Comisión de Libertad de Expresión, Mónica Gutiérrez, quien condenó la violencia del diputado opositor y al mismo tiempo cuestionó los agravios sufridos por la presidenta Cristina Fernández por parte de los “mercenarios de la información basura”. “El involucrado no es de nuestro espacio, que pese a ser el más agraviado desde la conductora para abajo, fue el que promovió que los periodistas no pueden ser perseguidos penalmente cuando son de interés público”, expresó Gutiérrez. Por su parte, De Narváez pidió disculpas “por haber incurrido en un hecho de violencia física, que no se puede justificar”. De todas maneras, ratificó que irá “hasta las últimas consecuencias” en la Justicia contra Casalongue porque “tiene derecho a informar pero no a difamar”.