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Hacía más de un año que se venían movilizando por separado. Ayer, basándose en un acuerdo de unidad, los piqueteros no oficialistas realizaron una jornada nacional de protesta con más de 90 cortes de ruta. Reclaman el aumento de los planes sociales a 350 pesos y su universalización.
“Para nosotros fue una medida fuerte porque cubrió todo el país, como es importante esta coordinación de los sectores de desocupados que se da en la calle para conseguir nuestros objetivos”, dijo Juan Carlos Alderete, de la Corriente Clasista y Combativa (CCC).
El plan de lucha encolumnó a una quincena de organizaciones, aunque el hecho verdaderamente significativo no residió en la cantidad sumada, sino en haber reunido al abanico casi completo de la oposición.
Para ponerse de acuerdo, los piqueteros hicieron en tres encuentros en los que consensuaron un petitorio, que ayer llevaron a la Casa Rosada. La mejora en el monto de los subsidios encabezó la lista, seguida de cuatro puntos:
u Planes de empleo para todos los desocupados.
u Aumento general de los subsidios, de manera que cubran la canasta familiar. No a la suba de precios y tarifas.
u Puestos de trabajo real en obras públicas. Respeto a la jornada laboral. Jornada de 6 horas.
u Libertad a los manifestantes detenidos en protestas sociales. Amnistía para los más de cuatro mil procesados por haber reclamado sus derechos.
Los firmaron la CCC, el MTD Aníbal Verón, el Frente Darío Santillán, el Movimiento Teresa Vive y las agrupaciones que integran el Bloque Piquetero, liderado el Polo Obrero, el Movimiento Teresa Rodríguez (MTR-Cuba) y el Territorial de Liberación, entre otros.
Los cortes de ruta se sintieron especialmente en el conurbano y en las provincias del noroeste, como Jujuy y Salta. El más importante estuvo ubicado en La Matanza, en el kilómetro 21 de la ruta 3, el lugar histórico de las concentraciones piqueteras. Los hubo también en la rotonda de Alpargatas, el cruce de Florencio Varela, el de Panamericana y la ruta 197 y en la entrada a La Plata. En la Ciudad de Buenos Aires se hizo una manifestación frente al Ministerio de Trabajo, aunque solamente con desocupados del distrito. Ayer el acento estuvo puesto en el Gran Buenos Aires.
De todas formas, en la ciudad se agregó una marcha del Movimiento que encabeza Raúl Castells, hoy enemistado con el resto de los grupos. Su sector salió a la calle con una medida propia, mientras el reciente desprendimiento de su agrupación participaba de la movida general.
En la jornada no hubo ningún episodio de tensión ni fiscales que se acercaran a intimar desalojos. El único incidente fue la detención, en Córdoba, de cinco desocupados. Anoche todos habían recuperado la libertad, aunque luego de que se les abrieran “causas por alteración en la vía pública y resistencia a la autoridad” a tres de ellos y por “merodeo” a los dos restantes, según detalló Juan Lencinas, de la Unión por los Derechos Humanos.
Los dirigentes piqueteros hicieron por la noche un balance de acuerdo al cual se habían movilizado “entre 50 y 70 mil personas”, dijo Néstor Pitrola (Polo Obrero). El plan de lucha tendrá un cierre el martes 19, con nuevas actividades en el interior y una marcha a la Plaza de Mayo. No hubo diálogo con el gobierno. Sólo la entrega de una copia del petitorio en la Casa Rosada, que la delegación debió dejar en el mostrador de la mesa de entradas.