Desde Rosario

La llegada hoy a Rosario del presidente Néstor Kirchner sacudirá el escenario político provincial, al confirmarse anoche que dos precandidatos a gobernadores del Frente para la Victoria integrarán la comitiva oficial que arribará a las 11, proveniente de Buenos Aires. Efectivamente, el ex canciller Rafael Bielsa y el jefe del bloque de Diputados Nacionales del Frente, Agustín Rossi, abordarán el avión junto al jefe de Estado y un grupo de ministros y funcionarios. De esta manera, lo que había representado casi una afrenta para el PJ santafesino, al haber sido el intendente Miguel Lifschitz el que confirmó la visita días pasados, terminará transformándose en un aval público para ambos aspirantes a enfrentar a Hermes Binner en septiembre de 2007. Kirchner encabezará hoy al mediodía el acto mediante el cual la Municipalidad de Rosario concretará la entrega simbólica de llaves a beneficiarios del barrio El Eucaliptal, donde se construyeron 232 viviendas para familias del asentamiento Molino Blanco, en el marco del Programa Rosario Hábitat que lleva adelante el Servicio Público de la Vivienda (SPV) municipal.

La semana pasada, cuando el intendente Lifschitz confirmó la llegada de Kirchner para el acto de hoy, la noticia causó un gran impacto entre las filas del peronismo de la provincia. “No hay aportes del municipio para esa obra, pero la van a facturar igual los socialistas porque el intendente va a estar al lado del Presidente”, se enojaba una fuente cercana al gobernador Jorge Obeid. Rápidamente, el justicialismo –ante lo que aparecía como inevitable– decidió “subirse” a la visita presidencial y pelear por sus espacios al lado del jefe de Estado. Pero las novedades de anoche cambiaron este panorama.

“La presencia de Rossi, pero sobre todo la de Bielsa en el acto, tendrán una lectura muy poderosa para todos los peronistas. Será la demostración de que el Presidente apoya a los dos candidatos y que más adelante se resolverá finalmente quién de los dos es”, dijo anoche a Rosario/12 una fuente que confirmó la presencia de ambos precandidatos en el avión presidencial.

Ayer mismo, Rossi advirtió que Bielsa, si quiere competir en la provincia, “tendrá que construir su fuerza política” para definir en “elecciones internas abiertas” quién será el postulante del oficialismo. Hasta ahora, la hipótesis de la interna entre ambos había quedado descartada, pero el jefe del bloque de diputados se siente fuerte para la competencia.

Por otro lado, Rossi admitió como “una posibilidad” que la vicegobernadora María Eugenia Bielsa –la hermana del ex canciller– se postulara como candidata a intendente de Rosario por el Frente para la Victoria. “Ella decidirá si es candidata, a qué lugar y por qué sector”, completó. Por impedimento constitucional, María Eugenia no puede ir en la nueva fórmula por la gobernación, por eso se especula con su pase a la intendencia. Sin embargo, en caso de que su hermano finalmente vaya por la gobernación se cree poco probable que María Eugenia también se postule. “Serían demasiados Bielsas”, explican.

En tanto, el actual intendente socialista Miguel Lifschitz aclaró ayer que “no soy oficialista ni opositor”, cuando se lo consultó por la lectura política del acto de hoy. Y también descartó que él o cualquier otro dirigente del Partido Socialista –Hermes Binner incluido– pudieran llegar a integrar un acuerdo electoral con el Frente para la Victoria en las próximas elecciones. De todas maneras, desde otro sector del Partido Socialista el diputado Eduardo Di Pollina había salido a marcar fuerte la cancha al subrayar el rol netamente opositor que ese sector del PS propugna: “Kirchner, aunque recurre al discurso progresista, es la profundización del pragmatismo menemista”, había exagerado el legislador nacional al comentar las alternativas del debate por los superpoderes y la reglamentación de los Decretos de Necesidad y Urgencia (DNU).