Jorge Telerman presentó oficialmente a Enrique Olivera como su compañero de fórmula y oficializó así su unión con Elisa Carrió, quien no acudió a la cita. “Para salir de las crisis políticas, el camino son las coaliciones en las que se acepten las diferencias para lograr un objetivo común”, remarcó el jefe de Gobierno porteño y aclaró que su acuerdo con la líder del ARI no conlleva el compromiso de respaldar su candidatura presidencial. Carrió no lo contradijo en cuanto a que nunca le pidió apoyo, pero precisó que “lo que nosotros pedimos es un alejamiento del kirchnerismo”.

El debut de la dupla Telerman-Olivera marcó el comienzo del último tramo de la campaña del jefe de Gobierno con miras a las elecciones del próximo 3 de junio y también el nacimiento de la coalición Autonomía Porteña. Aunque sus boletas en el cuarto oscuro no llevarán ese nombre porque no lo registraron ante la Justicia electoral, así se presentará a los ojos de los porteños la sociedad electoral entre el frente que articuló Telerman y la coalición cívica que construye Carrió.

La presentación de la fórmula Telerman-Olivera fue en el Palacio Rodríguez Peña. El acto tuvo el sello distintivo del jefe de Gobierno. El salón fue preparado como si fuese un gran café, con mesas en lugar de una platea. Los ministros porteños ocuparon las primeras; más atrás se acomodaron los demás funcionarios y el resto de los dirigentes que concurrieron. Hubo café y medialunas para amenizar la espera y la charla.

La integración de la o las listas de legisladores con las que Telerman acompañará su candidatura –aún no tiene decidido si serán una o dos– fue motivo recurrente de conversación. Y en más de una mesa se habló también de la renuncia de la ministra de Espacio Público, Lía María, en señal de desacuerdo con el cierre político con Carrió (ver aparte).

Telerman y Olivera se acomodaron en dos sillones naranjas de líneas modernas dispuestos junto a dos mesitas sobre el escenario. Allí, con un cartel a sus espaldas con las fotos de ambos y el signo “más” entre sus nombres, firmaron un documento con una serie de compromisos que se obligan a cumplir al frente del gobierno porteño.

Olivera destacó que el armado electoral acordado con el jefe de Gobierno “permite que convivan quienes piensan distinto pero buscan lo mismo, que es transformar Buenos Aires”. Fue el primero en hablar y enumeró también algunas de las cuestiones de gestión que imaginó junto a Telerman. “Nos obligamos a rendir cuentas periódicamente a nuestros mandantes políticos para reconstruir la relación de los representados y representantes”, prometió el legislador y representante de la Coalición Cívica de Carrió. También adelantó que trabajarán para “desarrollar una triple agenda”, que abarque cuestiones locales, como la seguridad; federales, que apunten a alcanzar la plena autonomía del distrito, y globales, para posicionar a Buenos Aires a la vanguardia de los grandes centros urbanos del mundo.

Telerman también hizo referencia a asuntos de gestión, pero puso mayor énfasis en la política y, sin nombrarlo, marcó diferencias con el candidato K Daniel Filmus: “Una Buenos Aires que se maneje por mandatos externos no sólo no sirve a los porteños, sino tampoco a la Nación”. “Este compromiso es con la ciudad de Buenos Aires”, reiteró de su acuerdo con Carrió y aseguró una vez más que jamás recibió “pedidos y presiones, ni muchísimo menos una definición sobre candidaturas presidenciales”.

Carrió, ausente en el acto, dio otra versión. “Lo que nosotros pedimos y tenemos suficientes garantías es de un alejamiento del kirchnerismo”, reveló la chaqueña y agregó: “Apoyamos la fórmula porque está Olivera, que es nuestra garantía junto a nuestra lista de candidatos. Olivera es una figura central con delegación de facultades ejecutivas. No estamos apoyando porque Telerman es maravilloso”.