El embajador Raúl Estrada Oyuela confirmó que fue desplazado de su cargo como Representante Especial para Asuntos Ambientales Internacionales de la Cancillería tras haber advertido que la Argentina “no tiene política ambiental”. La destitución –que fue anticipada por Página/12– hizo que el funcionario quedara en una especie de limbo, como diplomático sin tareas. Ayer, desde su casa, ratificó sus dichos: “Yo hablé con franqueza”, sostuvo, “los partidos políticos no incorporan la política ambiental en sus principios y cuando llegan al gobierno salen a apagar el incendio, pero no toman iniciativas. Es lo que hicieron todos y también Romina Picolotti, que como conoce todo el mundo no es una buena secretaria de Ambiente; hasta la Corte Suprema de Justicia la tuvo que llamar para pedirle explicaciones”.

Estrada Oyuela redobló sus críticas a la secretaria de Medio Ambiente, de la que se había distanciado el año pasado cuando la Argentina intentó frenar ante la Corporación Financiera Internacional, sin suerte, el otorgamiento de créditos a Botnia. Aquella impugnación fue el origen del primer entredicho entre ambos. El procedimiento había sido iniciado desde la Cancillería con una gestión del ahora desplazado funcionario; más tarde, Picolotti y su marido, Daniel Taillant, fueron contratados como abogados por el gobernador entrerriano Jorge Busti. Presentaron un recurso contra la instalación de las papeleras ante la Comisión Internacional de Derechos Humanos, con un escrito que tuvo el aval de los vecinos de Gualeguaychú. La gestión ante la CIDH tuvo una fuerte repercusión pública y Picolotti fue convocada por el gobierno nacional para ocupar la Secretaría de Estado. Al asumir se hizo cargo de continuar la impugnación para frenar los créditos ante la Corporación Financiera Internacional. Estrada Oyuela y ella pronto discreparon sobre la estrategia a seguir; final de la historia: el funcionario fue apartado del tema papeleras.

Le quedó el cargo de Representante Especial para Asuntos Ambientales, del que fue finalmente desplazado esta semana, luego de declarar en una conferencia de prensa en la sede local de la ONU que el país no tiene política ambiental. “En vez de demostrarme que la hay, prefirieron sacarme del puesto”, se quejó anoche Estrada Oyuela. Y volvió a cargar contra Picolotti: “Va a tener que contestarle a la Historia qué es lo que hace”, aseveró.

Para el diplomático, en el organismo que conduce Picolotti se ha contratado gente “que no tiene capacidad” para ocupar cargos en materia ambiental. Se refirió así a asesoras “que han tenido una postura histórica de defensa de las propuestas de Botnia o que han estado contratadas por el Banco Mundial”.

Fuentes de la Cancillería detallaron que las antiguas funciones de representación especial pasaron a una de las direcciones que estaban anteriormente a cargo de Estrada Oyuela. Lo más probable es que el diplomático se jubile, dado que ya cumplió 68 años y había iniciado los trámites para su retiro.