La Cancillería anunció anoche que protestará formalmente ante el gobierno británico por haber concedido a la empresa minera BHP Billiton un área de explotación en la cuenca este de las Islas Malvinas. Según el comunicado que hizo circular el Palacio San Martín, la Argentina enviará advertencias a las empresas beneficiadas por el Reino Unido. “La Cancillería protestará formalmente al Reino Unido por este nuevo acto unilateral que ilegítimamente pretende autorizar operaciones hidrocarburíferas en el área de la plataforma continental, sujetas a la soberanía y jurisdicción de la República Argentina. También se remitirán notas de desaliento a las empresas involucradas advirtiéndoles de la ilegitimidad de sus actos y de las sanciones legales aplicables”, difundió el Ministerio de Relaciones Exteriores que encabeza Jorge Taiana.

BHP Billiton es una de las corporaciones mineras más grandes del mundo. También se dedica a la extracción de petróleo y gas. Se trata de una fusión entre la empresa Broken Hill Propietary Company, de origen australiano, y la UK Billiton, británica. Según algunos informes que circulan en Internet, en el 2007 BHP Billiton tuvo ganancias por 16.700 millones de dólares. La corporación tiene oficinas en Holanda, Singapur y Bélgica. A primera hora de ayer, BHP Billiton anunció que había adquirido a la firma Falkland Oil una participación del 40 por ciento en 14 licencias de exploración y producción costa afuera cerca del archipiélago. La información de la compra de licencias apareció al mediodía en varios medios internacionales. El comunicado oficial de la Cancillería fue preparado poco después de que se difundiera la noticia. “Estos actos unilaterales han sido reiteradamente protestados por la Argentina y, entre otros motivos, llevaron a nuestro país a dar por terminada la declaración conjunta de 1995 en marzo pasado. Nuevamente el Reino Unido pretende disponer de recursos argentinos violando las reiteradas resoluciones de Naciones Unidas que convocan al diálogo entre ambos países”, comunicó el Palacio San Martín en otro párrafo de la nota.

A cambio de la concesión para explotar esas áreas, la minera BHP Billiton reembolsará a la administración de las islas con 10 millones de dólares en concepto de costos históricos. También acordó con el gobierno de las Malvinas perforar un mínimo de dos pozos de exploración en los próximos tres años. El objetivo de BHP Billiton es extraer y producir crudo y gas natural en la cuenca este de las Malvinas, en las aguas ubicadas al sur y al este del archipiélago.

Hace una semana y media, el gobierno británico hizo pública su intención de extender el área marítima bajo control de las islas. Cuando se conoció esa intención, el presidente Néstor Kirchner la cuestionó desde la Asamblea de las Naciones Unidas en Nueva York. “Mi gobierno expresa su enérgico rechazo a la pretensión británica de establecer espacios marítimos en torno de los archipiélagos”, dijo allí el Presidente. Luego insistió en los reclamos históricos sobre la cuestión: “Argentina considera incomprensible la pertinaz renuencia británica a abordar la cuestión de la soberanía”.

La concesión de estos permisos a BHP Billiton promete agravar el estado de la relación entre Buenos Aires y Londres, al menos en lo concerniente a Malvinas. En marzo pasado, la Casa Rosada anunció que las petroleras que firmaran contratos de exploración en las Malvinas bajo la ley británica no podrán tener actividades en el territorio argentino. Con el precio del crudo en su record internacional, la importancia estratégica de las aguas del Atlántico Sur parece haber aumentado en forma considerable. La tendencia se refuerza con el panorama de escasez de combustible que se da por descontado para el mediano plazo.