El plan agropecuario del INTA prevé también el crecimiento de las economías regionales, de cultivos industriales y de la forestación, entre otras áreas. Así propone cuadruplicar la producción de algodón, duplicar la de maní, aumentar en un 70 por ciento la yerbatera y en un 25 por ciento la de caña de azúcar. Para lograrlo, se proyecta aumentar fuertemente el área destinada a varios de estos cultivos. En el caso del algodón, se quiere pasar de las 500 mil hectáreas actuales a 2 millones; en el maní, de 200 mil a 400 mil hectáreas. En yerba mate, el INTA propone aumentar la actual producción de 275 mil toneladas a 450 mil, pero en este caso duplicando los rindes sobre la misma superficie. Es el mismo caso que la caña de azúcar, en el que el crecimiento esperado se estima que se puede lograr mediante una mayor productividad. También se propone un aumento del 50 por cuento en la producción de té, pasando de 80 mil a 120 mil toneladas. Con respecto al plan forestal para 2015, según lo estimado por INTA, sería factible pasar de 1,16 millón de hectáreas actuales de bosques implantados a 1,56 millón de hectáreas, con una tasa de crecimiento más bien moderada, de 80 mil hectáreas por año. El documento del INTA destaca que la mayor parte de las economías regionales está en manos de pequeños productores. Y que el objetivo para ellos debe ser incrementar la productividad y la competitividad mediante mejoras en la calidad y diferenciación de productos y fortalecer la inclusión social y el arraigo rural. Para promover su desarrollo propone una serie de medidas, entre las que se destacan “promover inversiones para el desarrollo de infraestructura específica destinada a pequeñas unidades productivas; transparentar y eficientizar los mercados; promoción de asociativismo y formas cooperativas; políticas fiscales y financieras diferenciadas, según actividad, tamaño de explotación y región; capacitación en aspectos tecnológicos y de gestión, y fortalecimiento de la agricultura familiar”.

Las metas para el 2015

Fuente: INTA