En un sistema judicial basado en los pactos a cambio de información Guido Alejandro Antonini Wilson eligió como abogada a Theresa Van Vliet, entrenada en la materia. Se trata de una ex fiscal experta en narcotráfico y en hacer arreglos con arrepentidos, que fue funcionaria de la Procuración durante la gestión de Jeanet Reno precisamente en la Dirección de Narcóticos. Van Vliet integró al parecer desde sus inicios un organismo en las sombras, conocido como Comité Blitz, especializado en pescar narcotraficantes arrepentidos con predisposición a negociar penas reducidas y otros beneficios a cambio de dar información y devolver lo que hubieran obtenido ilegalmente. El abogado Roy Black denunció en el juicio contra su cliente Fabio Ochoa, uno de los cabecillas del cartel de Medellín, que el Comité (integrado por la DEA, el FBI, la CIA, la Aduana y la Procuración General) arreglaba los decomisos. Lo acusó de “burlar el sistema judicial de Estados Unidos tomando el dinero de los acusados y aun no acusados de narcotráfico, a fin de arreglar tratos de falsa cooperación para garantizar que los traficantes no recibieran sentencias de prisión”. Después de aquella denuncia Van Vliet renunció a la fiscalía y se pasó a la actividad privada.