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Roberto Fernández, titular de la UTA

“Acá hay que venir a trabajar”

El titular de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), Roberto Fernández, habla agitado y por momentos se le corta la respiración. Asegura que los delegados rebeldes que ayer hicieron un plebiscito para armar un nuevo gremio “le están faltando el respeto” a su sindicato y que se le terminó la paciencia. Según Fernández, el paro de subtes se debió a “los caprichos de cuatro muchachitos”, a los que tilda de “provocadores profesionales” y acusa de actuar en complicidad con la empresa Metrovías.

–¿Cuál es su opinión sobre el plebiscito?

–No estoy en contra de que se haga, pero no corresponde hacerlo dentro de la empresa, es una provocación. Si lo quieren hacer, que lo hagan afuera de las instalaciones.

–¿Es ilegal hacerlo adentro?

–Es como entrar adentro de tu casa sin pedirte permiso, que lo hagan en el Ministerio de Trabajo, no en la empresa. La empresa está para trabajar y no para permitir que se haga política. Si no es un viva la pepa. Acá hay que venir a trabajar, esto es un servicio público.

–¿La UTA no tuvo nada que ver con los hechos violentos?

–Había gente nuestra alrededor, pero no participó. Ellos son agitadores profesionales, se hacen las víctimas, se autoflagelan; generan la violencia porque no tienen otra alternativa. Esto es un acto electoral, buscan prensa y consiguen publicidad. Se tiran a las vías y la policía no puede hacer nada, tiene que intervenir el fiscal, el juez..., es tiempo que se pierde, que pierden los pasajeros. Y lo peor es que la empresa permitió que se hiciera el plebiscito. Tirarse a las vías no es convocar, es agitar. Es una ofensa contra los trabajadores. Si quieren hacer un sindicato nuevo, primero tienen que renunciar a la UTA. Los que armaron todo esto ni siquiera se presentaron a las elecciones.

–Ellos impugnaron esa votación.

–Pero el Ministerio de Trabajo me la aprobó. Hace dos meses que hay nuevos delegados y ellos no los respetan. Siguen la teoría de la revolución permanente, luchan por ideales que no son los de los trabajadores y los usan para hacer política. Y la verdad es que ya estamos cansados del conflicto permanente, esto confunde a la opinión pública. Acá no hay una interna gremial, son grupos de izquierda que quieren tomar el poder y no lo vamos a permitir..., porque quieren romper la democracia sindical. Nosotros sabemos hacer una sola cosa: defender a los trabajadores, de política no sabemos nada.

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Claudio Dellacarbonara, delegado de base del subte

“La UTA hace política mafiosa”

Claudio Dellacarbonara es uno de los delegados de base del subte. Comenta que muchos pasajeros se acercaron a felicitarlos por el plebiscito y califica al titular de UTA, Roberto Fernández, como “un mentiroso y un patotero”. Por otra parte, recuerda que en el estatuto de ese sindicato se establece que los delegados responden al gremio y no a los trabajadores. “Y desde hace quince años que tratamos de que esto deje de ser así”, acota.

–¿Esperaban incidentes cuando plantearon la idea del plebiscito?

–La verdad es que no. Creíamos que por la situación actual, por lo inocente que fue la convocatoria, no iba a haber violencia. Sí esperábamos que mandaran a la patota a convencer a los compañeros para que no voten o voten en contra. Algo que también resulta coercitivo, pero vinieron armados y tenemos todo filmado. Están complicados. ¿Cómo justifican lo de hoy? Estaba Nora Cortiñas, de Madres de Plaza de Mayo, había diputados. Es injustificable lo que hicieron.

–¿Está prohibido hacer un plebiscito dentro de las instalaciones del subte?

–No hay ninguna norma que prohíba hacer un plebiscito en el subte, es un espacio público, no de la empresa, que es una concesionaria. La UTA defiende los intereses de Metrovías, pero la empresa no tuvo problemas, hasta nos dejaron poner el cuarto oscuro para votar.

–El plebiscito pudo concretarse pese a esto.

–A la hora de la agresión ya habían votado 200 personas de un padrón de 420 y con mucha gente de vacaciones. Después del paro, retomamos el plebiscito y al final votó el 75 por ciento. Solo 4 personas votaron en contra. La UTA quiso impedirlo, pero al final resultó una forma de sacarse la máscara, cuando los compañeros vieron los actos de violencia dijeron “basta de esto, no es lo que queremos” y eso los impulsó a votar.

–El planteo de la UTA es que ustedes son una minoría.

–La UTA no representa a nadie, no sabe cómo mantener el control de lo que para ellos es sólo un negocio. Por eso intentó asustar a la gente para que no vote, hace política mafiosa. El secretario general es un mentiroso, un patotero. Un ejemplo: a los nuevos delegados les decimos “deletruchos” y hace poco en la línea E un compañero se negó a saludarlo y el “deletrucho” le pegó una piña. Ese es el clima, son tipos que no tienen legitimidad, que desde que están en el cargo no vienen a trabajar o se sientan en un rincón.

Entrevistas: Emilio Ruchansky