El flamante ministro de Seguridad, Justicia y Derechos Humanos, Julio Alak, le explicó a Página/12 que su desafío es poder darle seguridad “al ciudadano común, trabajando fuerte en la seguridad interior, pero entendida de la mejor manera”. Entre los temas de la agenda que se propone llevar adelante desde su nuevo cargo (ver página 6), Alak también incluyó la de darles mayor actividad del Poder Judicial, un funcionamiento orgánico al Consejo de la Magistratura y seguir adelante con los procesos de juicios orales en contra de los responsables de los delitos de lesa humanidad en todo el país. “Por pedido expreso de la Presidenta tenemos un profundo respeto por la independencia de los Poderes, pero también queremos la aceleración de todas las causas; no sólo a las vinculadas a derechos humanos, que son las que más hieren el sentimiento moral de los argentinos, sino también las otras”, comentó. En cuanto a los delitos cometidos en el marco de la represión ilegal durante la dictadura, recordó que es “un militante con más de 30 años de lucha en la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos” y afirmó: “Nuestro mensaje es claro, los responsables de crímenes de lesa humanidad deben tener el castigo que se merecen. Creo que lo correcto es trasladar a la gestión pública el pensamiento ideológico y doctrinario de nuestro gobierno.” Alak, quien al momento de su designación como titular de la cartera de Justicia venía desempeñándose al frente de Aerolíneas Argentinas, destacó las modificaciones realizadas por Cristina Fernández de Kirchner. “El recambio –enfatizó– es importante porque hay funcionarios que tienen que ocupar otros lugares dentro de la estructura política.”