Iniciada la veda electoral, Daniel Filmus colgó ayer la campera de candidato a jefe de Gobierno porteño y se puso el saco de ministro de Educación. De nuevo en su despacho en el Palacio Pizzurno encabezó el acto por la firma de un acuerdo de cooperación educativa con el embajador de Cuba, Aramís Fuentes, que contempla el reconocimiento recíproco de títulos universitarios y dará validez a los títulos de grado y de posgrado otorgados por instituciones reconocidas oficialmente por los dos países. Filmus subrayó la importancia de que “estos chicos puedan desempeñarse profesionalmente en nuestro país” y afirmó que era “el final de un proceso que llevó años y representa un paso adelante en nuestra relación histórica con Cuba”. El diplomático cubano expresó que el documento firmado representaba “un acto de justicia que garantiza y respalda los esfuerzos de cientos de jóvenes argentinos y cubanos”, y destacó “el compromiso en el ámbito de la cooperación que representan los mil becarios argentinos que reciben formación académica y en valores en la Escuela de Medicina de Cuba”. Estuvo presente Alberto Dibbern, secretario de políticas universitarias de la UBA.