EL PAíS › LA MARCHA DE LA INVESTIGACION A LOS POLICIAS INVOLUCRADOS
Novedades sólo “miércoles o jueves”
Tal vez sea el fin de semana largo, tal vez los procedimientos que exigen un tiempo que no coincide con las expectativas de la familia de Diego Peralta y del público. Lo cierto es que desde el jueves pasado, cuando se conocieron las resonantes declaraciones del único detenido en el caso, José Pablo García, implicando en el secuestro del chico a tres policías del incinerado destacamento de El Jagüel –entre ellos al cuestionado sargento Miguel Angel Giménez–, en el caso no se han producido modificaciones visibles. Algún investigador prefirió mantener reserva y sólo poner una fecha: “El miércoles o jueves quizás tengamos novedades”.
El jueves pasado, tres días después del hallazgo del cuerpo de Diego Peralta en una tosquera de Ezpeleta, Juan Pablo García fue citado a ampliación de indagatoria: había cambiado el delito que se le imputaba, de secuestro extorsivo a secuestro seguido de homicidio. Según su abogado Adrián Tenca, “no dijo nada nuevo de lo que ya había dicho en su primera declaración”. En todo caso, García volvió a declararse inocente y asegurar que sólo fue testigo del secuestro, y señaló a tres policías y al menos a tres civiles.
Uno de los tres policías, aseguró, era Miguel Angel Giménez. Según Tenca, su defendido le reveló que el sargento se encontraba en un auto blanco (coincide con la descripción del Volkswagen Gol de Giménez), “como si supervisara el operativo”. Otros dos policías fueron reconocidos por el detenido, no por nombre sino por sus rostros. “Dijo que los conocía de verlos en el destacamento de El Jagüel y que podría identificarlos porque los conoce de verlos por el barrio”. García agregó que los dos policías bajaron de un Senda rojo, mientras que Giménez permanecía en el auto blanco “como si supervisara” lo que coincide con lo declarado por el remisero Fermín Amarilla, que parecía un operativo policial. Con Giménez, según García, había otras dos personas, “dos chorritos que trabajaban con su protección”. Los investigadores no descartan que uno fuera García.
El detenido también señaló a una mujer en bicicleta que pasaba por el lugar. El jueves pasado, el mismo día de la ampliación de indagatoria, circuló un identikit de origen dudoso, aunque fuentes judiciales aseguran que forma parte del expediente. Habría sido trazado por expertos de la Federal, bajo el dictado de una testigo, probablemente la mujer en bicicleta. Por el momento, el juez federal Carlos Ferreiro Pella no citó a los policías señalados por García, aunque el misterioso identikit tuviera cierto parecido con el sargento Giménez. García fue detenido el 2 de agosto pasado, acusado de haberse comunicado con la familia Peralta para pedir rescate por Diego. El detenido lo niega, y asegura que llamó a la familia para informar lo que había visto, y sostuvo que no lo dijo antes porque temía acercarse a la casa de los Peralta por la presencia de los mismos policías que él incriminaba en el secuestro. Luis Peralta, padre del joven asesinado, insiste en que llamó para pedir dinero. Una pericia de voz determinará si es cierto.