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Estos son algunos de los que participan en el Café de los maestros:
- Horacio Salgán: Además de pianista y compositor, es uno de los directores de orquesta que marcaron escuela propia. En 1960 formó el Quinteto Real, con el que siguió presentándose hasta hace poco (actualmente lo reemplaza su hijo César).
- Leopoldo Federico: El bandoneonista, director y compositor sigue sorprendiendo cada vez que reaparece al frente de su orquesta (lo cual, por suerte, está haciendo seguido últimamente). Pasó por la orquesta de Carlos Di Sarli, que lo marcó para siempre, por formaciones como las de Osvaldo Manzi, Lucio Demare y Horacio Salgán, hasta llegar a su primera experiencia como titular junto a su amigo Atilio Stampone. En 1955 fue convocado por Astor Piazzolla para su mítico Octeto Buenos Aires, y 4 años más tarde acompañó a otro que hizo historia, Julio Sosa.
- Lágrima Ríos: La única ciudadana que llega del otro lado de la orilla a este seleccionado deja el sello único de su voz en tangos pero también en candombes y milongas, entre otros géneros. Registró a dúo con Santaolalla el vals Un cielo para los dos, y una bella y profunda versión de Vieja viola, con Aníbal Arias en guitarra.
- Mariano Mores: Tiene 83 años y es músico profesional desde los 14, cuando se ganó una beca para ir a estudiar a Salamanca y se convirtió en un niño prodigio a quien presentaban como “Lolo, el compositor y pianista relámpago”. En tantos años de vida artística compuso algunos de los temas fundamentales del tango junto a gente como Enrique Santos Discépolo, Enrique Cadícamo, Homero Manzi o Cátulo Castillo, y fue piano solista de la orquesta de Francisco Canaro. Más acá en el tiempo, imprimió un sello personalísimo con su orquesta de corte sinfónico, con la que sigue trabajando y llenando cada sala en la que se presenta. Aquí se luce con dos de los temas que lo identifican: Taquito militar y Tanguera.
- Nelly Omar: Con casi noventa años, conserva un registro asombroso, tal como demostró hace poco en su presentación ante un Luna Park repleto. Fue la encargada de estrenar Sur y –dice– la que inspiró a Homero Manzi los versos de Malena y de Ninguna. Identificada con el gobierno peronista, tras el golpe de 1955 sufrió una larga persecución política. Aquí se luce junto a un cuarteto de guitarras en Viejo jardín.
- Emilio Balcarce: Violinista, bandoneonista, compositor, arreglador y director de orquesta, le cabe a la perfección el título de maestro. Al frente de la Orquesta Escuela de Tango, actualmente lleva adelante una tarea de formación de nuevas generaciones en los diferentes estilos de las grandes orquestas del tango. Es uno de los pocos que no sufrió la goma de Aníbal Troilo en su paso por su orquesta. Su nombre también está asociado al Sexteto Tango, al éxito masivo de Alberto Castillo y, por supuesto, a Osvaldo Pugliese, con quien trabajó durante veinte años. Aquí interpreta uno de los tangos de su autoría que grabó con esa orquesta, Si sos brujo.
- Atilio Stampone: Pianista, arreglador, director y compositor, su nombre está ligado a las vanguardias de los ’50. Debutó a los 16 años en la orquesta de Pedro Maffia. Integró la primera orquesta de Astor Piazzolla y su Octeto de Buenos Aires. Fue amigo y acompañante musical de Roberto Goyeneche. Creador de Afiches y de Mi amigo Cholo, actualmente dirige junto a Néstor Marconi la Orquesta Nacional Juan de Dios Filiberto.
- Carlos García: Compositor, arreglador y director, actualmente dirige junto con Raúl Garello la Orquesta de Tango de Buenos Aires. En Café de los maestros interpreta su tango Al maestro con nostalgia, que compuso en homenaje a Carlos Di Sarli. “Se me ocurrió cuatro años después de su muerte, y me acercó al misterio de la música y la autoría”, dice. “Cuando lo escuché no me parecía que fuera mío. Y ahora, que ha pasado el tiempo y lo tocamos cada tanto con la Orquesta de Buenos Aires, corroboro que no es mío, que es un homenaje colectivo al gran Di Sarli.”