La aprobación al pedido de acumulación de las causas contra el cura Julio César Grassi por abuso sexual agravado y corrupción de menores fue casi un parto. Ocho meses se tomó la Cámara de Garantías para hacer lugar a la apelación de la fiscal Sandra Míngolo y el abogado querellante Juan Pablo Gallego, pero falló ayer y dejó sin efecto la decisión del Tribunal Oral N°1 de Morón de desdoblar en dos el juicio. Al considerar que “provocaría un gravamen irreparable” en las víctimas la separación, los casos de “Gabriel” y “Ezequiel”, que iban a juzgarse por un lado, y el de Luis Gutiérrez, por otro, serán analizados en un mismo juicio oral. “Esto supone también un beneficio para Grassi, porque la unificación de la condena hará que no sobrepase cierto monto la pena que reciba”, destacó Gallego, que le adelantó a Página/12 que el debate comenzaría en agosto.

“La decisión de la Cámara de Garantías es por un lado una satisfacción, pero no deja de ser preocupante la demora en el fallo en casi un año, lo que siempre es en perjuicio de la víctima”, consideró el abogado y particular damnificado en nombre del Comité en Defensa de los Derechos del Niño. Gallego y la fiscal Sandra Míngolo apelaron la decisión del Tribunal Oral N°1 de Morón de desdoblar en dos el juicio el 31 de agosto de 2007. Pasaron la primavera y el verano y la Sala 1 de la Cámara de Garantías, integrada por Mario Moldes y María del Carmen Peña, hizo ayer lugar al reclamo porque consideró que la fragmentación del juicio provocaría en las víctimas un “gravamen irreparable”.

Los motivos de la acumulación de ambas causas son, básicamente, “que se tramitan en el mismo tribunal, contra el mismo y único imputado y por hechos similares que ocurrieron en el mismo lugar”, según enumeraron los camaristas en su fallo. “En rigor, es una única causa, porque los tres casos salieron a la luz con la misma investigación periodística”, apuntó Gallego, en diálogo con Página/12.

“El Tribunal Oral N°1 de Morón alegaba que por una cuestión de agenda los haría por separado, pero es importante que se realicen en conjunto para proteger a las víctimas y no exponerlas a atestiguar en la otra causa ni a que el juicio por su caso comience de aquí a dos años”, contrapuso el abogado. Con distintos argumentos, Grassi logró postergar varias veces su declaración indagatoria en el caso por el supuesto abuso a Luis Gutiérrez. Esa declaración tiene como próxima fecha este 15 de mayo. Si es que Grassi se presenta.

La fiscal, la querella y las víctimas esperan con ansia que el cura se siente frente al tribunal, porque en esa causa existe una pericia que es “de suma importancia para demostrar que el imputado tiene parámetros de conducta de un delincuente sexual”, subrayó Gallego. Por ello, el abogado y Míngolo habían solicitado que Grassi fuera sometido a un juicio oral desde una perspectiva “integral”. Si no, para Gallego, sería “como juzgar a un ladrón de bancos hoy por robar una tarjeta, mañana por otra”.

Según estima la querella, el juicio oral comenzará “en agosto, luego de la feria judicial” y se extenderá a lo largo de setenta días, hasta mediados de octubre. La acumulación de causas no duplica la duración, porque “en un 80 por ciento, los testigos son los mismos, y el imputado es el mismo en ambas causas”, explicó Gallego. A la vez, al acumularse las causas, se unifican las penas y se evita así sobrepasar un determinado monto en la condena, lo que para el abogado presupone un juicio “más objetivo y completo para las garantías de la querella y las de Grassi”.

En la causa ahora unificada, Grassi será juzgado por diecisiete hechos en perjuicio de “Gabriel”, “Ezequiel” y Luis Gutiérrez, quienes estaban bajo su guarda en la Fundación Felices Los Niños cuando fueron abusados.