La víctima es un afortunado transportista que ocho meses atrás ganó una licitación del gobierno porteño para llevar y traer de las colonias de verano públicas a jóvenes discapacitados. El victimario es un funcionario que le pedía peaje si quería volver a ganar la licitación. El transportista había cobrado 200 mil pesos por su trabajo y el peaje que se le exigía era 30 mil. Ayer, el funcionario de la Secretaría de Deportes fue detenido luego de que una cámara oculta, controlada por los detectives de la División Defraudaciones y Estafas de la Superintendencia de Investigaciones de la Policía Federal, lo sorprendiera in fraganti. El acusado trabajaba como coordinador del Area de Discapacidad de la Secretaría y tenía 22 años de antigüedad y 10 en el trabajo con discapacitados. También sería delegado de Sutecba, el gremio de los empleados municipales. El funcionario había comenzado a llamar y presionar al transportista un par de semanas después de que éste cobrara por su servicio. Era la única forma de volver a ganar las próximas licitaciones.

Luego de varios meses, el contacto entre ambos siguió al igual que llamados amenazantes y los pedidos de coima por parte del funcionario. Finalmente, el transportista decidió denunciarlo ante el Ministerio de Justicia porteño primero y entonces la División Defraudaciones y Estafas se hizo cargo de la investigación. El operativo empezó hace tres días y, bajo la supervisión de los detectives, el denunciante pactó una reunión en una confitería ubicada en Sarmiento 570, entre Florida y San Martín.

Allí fue el denunciante con una cámara oculta que filmó el momento en que el funcionario recibía los 30 mil pesos. Este video más algunas fotografías tomadas por los investigadores serán utilizadas por la Justicia para incriminar al acusado. Ayer, el ministro de Justicia y Seguridad de la Ciudad, Guillermo Montenegro, y el subsecretario de Deportes, Francisco Irarrázaval, confirmaron que el coordinador fue “exonerado con causa”, tras la detención. Por su parte, la defensora Adjunta del Pueblo porteño, Graciela Muñiz, recordó que ya había denunciado esta y otra irregularidades como la falta de habilitación de los micros, la ausencia de matafuegos, cinturones de seguridad y botiquín de primeros auxilios.