Durante más de dos horas, a puertas cerradas para la prensa, el ministro de Justicia y Seguridad bonaerense, Ricardo Casal, informó a una veintena de diputados sobre la marcha de la investigación del homicidio de la niña Candela Sol Rodríguez. Al salir de la reunión que se hizo en la Comisión de Seguridad de la Legislatura provincial, Casal se limitó a decir que había expuesto sobre “una investigación muy compleja de un delito gravísimo”, motivo por el cual eludió brindar “ningún tipo de información sobre la causa”. En cuanto al tono que tuvo la reunión con los diputados, Casal insistió en que fue sólo “una reunión informativa” en la cual se discutieron “temas relacionados con el diseño de las políticas públicas en materia de seguridad”. Varios diputados consultados por Página/12 al término del encuentro precisaron que hubo “duras críticas” al accionar de la Policía Bonaerense en el caso Candela y que varios de los presentes plantearon la necesidad de “acelerar el debate acerca de la creación de una Policía Judicial o de Investigación Criminal, moderna y desarrollada, para intervenir en delitos complejos como la trata de personas, los secuestros extorsivos, el narcotráfico o el lavado de dinero”.

En medio de una gran confusión, rodeado por los medios de prensa que se habían hecho presentes en el Palacio Legislativo, Casal hizo un relato flaco en detalles sobre lo ocurrido durante su charla con los legisladores. “La investigación de este delito gravísimo, con la muerte de una nena de 11 años, es muy compleja, de manera que en aras de la gravedad y la complejidad del caso no daré opiniones ni información concreta sobre la marcha de la causa”, aclaró el ministro, tapado por micrófonos y cámaras de televisión. Reconoció que había brindado a los diputados “detalles sobre algunas decisiones referidas a la investigación”, en respuesta a algunas consultas que le fueron formuladas en la reunión.

Casal dijo que agradecía “la invitación” que le había hecho la Cámara de Diputados y aseguró que había escuchado “las opiniones de los señores diputados, más allá de nuestras diferencias, y todas ellas serán analizadas”. El presidente de la Cámara baja bonaerense, el oficialista Horacio González, consideró que fue “una reunión muy positiva” y que lo más importante fue que el ministro Casal “haya charlado con los diputados para informar sobre algunos aspectos de la investigación del caso Candela”. Los diputados de la oposición, por su parte, hicieron duros cuestionamientos a la actuación policial y judicial.

“Lo que ha demostrado el caso Candela es que las instituciones que tienen en relación con la seguridad, llámense Policía Bonaerense, Poder Judicial o Servicio Penitenciario, no están preparadas para afrontar delitos complejos y ponerles fin a las actividades del crimen organizado”, declaró el diputado Marcelo Díaz, del GEN/PS. “Lo que hemos planteado distintos legisladores es la necesidad de discutir, en el marco del Poder Legislativo, una serie de medidas en materia de políticas públicas”, agregó Díaz. Precisó que una de las iniciativas es “la creación de la Policía Judicial, dependiente del Ministerio Público, para que se convierta en una herramienta válida para enfrentar los delitos complejos”. “Tienen que crearse organismos oficiales más eficientes, pero para que haya una Policía Judicial eficiente tiene que reformarse también el Ministerio Público, porque la actuación de los fiscales, en el caso Candela, ha dejado mucho que desear”, opinaron Díaz y su compañero de bancada, Jaime Linares. “Yo estoy de acuerdo en que es un error politizar un caso tan grave como el de Candela, pero en ese mismo sentido tengo que señalar que tampoco sirve que el gobernador (Daniel Scioli) se involucre tan directamente, concurriendo al lugar apenas se conoció la aparición del cuerpo, porque ése también es un acto político.” Linares pidió que de ahora en más haya “un vocero del Poder Judicial, porque los fiscales hablaron de más y, en vez de esclarecer, complicaron todo”.

Los que más cuestionaron el informe de Casal en la Legislatura fueron los legisladores que responden a Francisco de Narváez. “Una reunión reservada no sirve en estos casos. Se ha perdido la oportunidad de interpelar al ministro Casal. Las verdades a puertas cerradas no le sirven a nadie, sobre todo cuando hay responsables cuestionados y autores que se encuentran prófugos”, sostuvo Ramiro Gutiérrez, de la bancada que conduce De Narváez. Este bloque fracasó, la semana anterior, en su intento de lograr apoyo para interpelar a Casal. La mayoría de los bloques resolvió que se hiciera sólo una reunión informativa y accedió ayer a que el encuentro se realizara sin la presencia de la prensa.