[cerrar]

Comparta esta nota con un amigo

E-Mail de su amigo
Su nombre
Su E-Mail

El juicio oral al líder de la Unión Ferroviaria (UF), José Pedraza, su número dos y ocho integrantes de una patota acusados del homicidio de Mariano Ferreyra comenzaría en febrero de 2012. Lo anunció el Tribunal Oral Criminal 21, en una audiencia que se realizó ayer en presencia de las defensas, la fiscalía y las querellas que representan por un lado a la mamá del joven asesinado el 20 de octubre del año pasado y a otros tres militantes del Partido Obrero (PO) que sufrieron heridas de bala, con graves secuelas en el caso de Elsa Rodríguez. Los jueces estimaron que las audiencias se podrían extender durante siete meses, porque declararían unos 300 testigos.

Además de la fecha de juicio, suscitaba expectativa la discusión por los planteos de nulidad que hicieron algunas defensas. Por ejemplo, la de Pedraza pidió invalidar las escuchas que reforzaron la acusación en su contra, por considerar que la jueza de Instrucción no había fundamentado la orden para la pinchadura (al teléfono del segundo del gremio, Juan Carlos “Gallego” Fernández). También cuestionó escuchas al apoderado del gremio, Juan Araya. De todos modos, los jueces Horacio Días, Carlos Bo-ssi y Diego Barroetaveña decidieron que la discusión puntual se hará por escrito y luego ellos decidirán. Lo mismo con un pedido de nulidad de la acusación contra el picaboletos Guillermo Uño y de la de Salvador Pipitó.

Hubo algunos contrapuntos en torno de temas como la garantía de presencia de público en las audiencias, que planteó el CELS, que representa a Beatriz Rial, la mamá de Mariano, y que cuestionó –por ejemplo– el abogado de Uño. Lo más probable, anunció el TOC 21, es que las audiencias se hagan en la sala de la Cámara Federal del Palacio de Tribunales, donde se hicieron el Juicio a las Juntas Militares y el de Cromañón. Así lo propuso la abogada María del Carmen Verdú, por la querella de los heridos. Otra opción es la sala donde se hizo la audiencia de ayer, en Lavalle 1171.

La lista de testigos también generó algunos cruces, en especial por la presencia de algunos nombres que las querellas evaluaron innecesarios, como Elisa Carrió y Luis D’Elía. La lista ya comenzó a ser depurada. En cuanto a las pruebas suplementarias, la fiscalía de María Luz Jalbert reiteró su oposición a hacer una reconstrucción del homicidio, como reclaman varias defensas. También se discuten nuevas pericias balísticas y un pedido del CELS para analizar la motivación económica que habría tenido Pedraza al instigar el crimen.