Al cumplirse un mes del temporal que inundó La Plata, damnificados de distintos barrios de la ciudad marcharon hacia la municipalidad platense para reclamar “urgentes soluciones” a fin de evitar otras catástrofes, recordar a las víctimas fatales y pedir subsidios para paliar los daños. Las columnas habían llegado a la Plaza Moreno con carteles que identificaban a cada uno de los barrios afectados por la inundación; allí, encendieron velas para recordar a los muertos y luego leyeron un petitorio que entregaron a los poderes Ejecutivo y Legislativo provincial. En tanto, el juez Luis Arias, que había sido apartado de dos causas que investigaban la cantidad de víctimas mortales de la inundación, anunció que volvió a quedar habilitado para intervenir en esos expedientes. “De las pruebas que se aportaron al expediente surge que hay más víctimas del temporal que las declaradas oficialmente”, ratificó ayer. Por su parte, el vicegobernador bonaerense, Gabriel Mariotto, puso en duda que los muertos hayan triplicado la cifra oficial, como señaló una versión, porque en ese caso se hubiera registrado “una convulsión social”. Sin embargo, reconoció la necesidad de que la investigación judicial, que afirma haber sumado cinco nombres a la lista, siga adelante.

Las columnas, convocadas por las asambleas de damnificados y también por Facebook, llegaron a la Plaza Moreno, en la calle 12 entre 51 y 53, poco después de las seis de la tarde. Una vez allí, los manifestantes encendieron velas sobre la plaza en memoria a las víctimas fatales del temporal. Poco después, los delegados de las asambleas y organizaciones barriales leyeron un petitorio –avalado por más de diez mil firmas– que luego entregaron al Concejo Deliberante, la Intendencia, las Cámaras de Diputados y Senadores provinciales y la Gobernación. Ante el municipio, vallado y custodiado desde dentro por oficiales de policía, los manifestantes desplegaron un muñeco gigante del intendente Pablo Bruera con una palmera al lado, en referencia a que el funcionario se hallaba en Brasil cuando arreció el temporal.

Los manifestantes reclamaron conocer el número real de víctimas fatales por el temporal, pidieron que se les otorguen subsidios y no créditos, que se realicen obras de infraestructura y que haya “juicio y castigo a los responsables políticos”. El petitorio señaló que, de acuerdo con un relevamiento nominal realizado por las asambleas barriales, “se detectaron 76 muertos por el temporal”, es decir, 24 más que los incluidos en la nómina oficial. “Estamos presentes en la plaza porque la movilización de los vecinos es la garantía que hará posible nuestros reclamos. La Plata está de pie reconstruyendo lo que la desidia destruyó”, afirma el texto.

El petitorio vecinal también reclama “justicia por los muertos” y pide conformar una comisión investigadora con la participación de familiares “para determinar fehacientemente la cantidad de muertos por el temporal”. Las autoridades, señalaron, “echan la culpa a la lluvia caída ese día”, pero “no se habla de las obras necesarias para evitar esto ni de cuestiones edilicias que favorecieron el negocio inmobiliario”, en alusión a los edificios construidos en los últimos años. Los platenses movilizados también agradecieron “el esfuerzo encomiable de la gran cantidad de gente que colaboró con los afectados” y pidieron la exención de tasas e impuestos para los vecinos de La Plata, Berisso y Ensenada.

Por su parte, el juez platense del fuero Contencioso Administrativo Luis Arias ratificó que volvió a quedar habilitado para intervenir en los expedientes donde se investiga cuántas personas murieron a raíz de la inundación. Arias afirmó que “de las pruebas que se aportaron al expediente, surge que hay más víctimas del temporal que las declaradas oficialmente” por el gobierno de Daniel Scioli. De momento, la investigación judicial sumó cinco muertes más a la lista: a las 52 reconocidas oficialmente, añadió las de Juan Carlos García, Edgardo Roberto Reguera, Hebe de las Mercedes Oleastro Ballve, Dolores Felicidad Fernández y Nélida Reyes, todos ellos de ente 62 y 90 años.

El vicegobernador Gabriel Mariotto puso en duda que la cifra total triplique a la oficial, como denunciaron entidades sociales. Si fuera así, aseveró, ya habría “una convulsión social de amigos y familiares visibilizando esa situación”.