SOCIEDAD › EMPRESARIOS Y CONTADORES DETENIDOS, 600 AUTOS SECUESTRADOS
Golpe a la industria del desguace
Tres desarmaderos que trabajaban a puertas cerradas fueron allanados por orden de la Justicia. Los seis detenidos eran parte de una banda desbaratada en mayo. Actuaban con una pantalla legal.
Por Alejandra Dandan
Fue un golpe fuerte contra una de las organizaciones más importantes de comercialización de autos robados. Con tres allanamientos en Moreno, Burzaco y Avellaneda, la fiscalía de Lomas de Zamora detectó ayer unos 600 autos robados en desarmaderos que operaban a puertas cerradas. Entre los seis detenidos hay dos empresarios y dos contadores, responsables de fraguar la documentación para blanquear los negocios y las piezas que salían a la venta. De acuerdo con la información a la que accedió Página/12, los nuevos detenidos son parte de la organización manejada por Osvaldo Ricardo Lettieri y Gustavo Kosariuk, jefes de la banda VIP desmantelada en mayo de este año. Aquella banda era un desprendimiento del grupo del todopoderoso Elbio Fernández, conocido como El Rey del Corte, que había montado más de cien galpones en la provincia en sociedad con un funcionario de la Fiscalía de Estado.
En los últimos meses, en los galpones allanados ayer se había paralizado casi todo el movimiento. Atemorizados por la campaña emprendida en la provincia contra los desarmaderos que crecieron con protección y participación de la Bonaerense, los responsables de esos locales seguían con los robos de autos pero no comercializaban. Por esa razón, “trabajaban a puertas cerradas y en los locales aparecieron 407 y 227 autos robados con pedidos de secuestros muy frescos”, le explicó a este diario el comisario Osvaldo Seisdedos, que está al frente de la Dirección de Prevención del Delito contra la Propiedad del Automotor.
Los procedimientos se hicieron en tres galpones y en el domicilio particular de quien actuaba como contador de la banda. Los galpones estaban sobre la calle Monteverde 4074 de Burzaco, otro en Rivadavia 310 de Avellaneda y el tercero sobre la Ruta 5 a la altura del kilómetro 39 en Moreno. Al estilo de la banda de Lettieri y Kosariuk, desbaratada en mayo, también estos tenían una estructura aparentemente legal: “Cada galpón tenía un gerente, empleados en blanco, impuestos al día y tenían al contador y a su mujer que le daban la pantalla legal para soportar cualquier tipo de inspección”, explica ahora Sergio Antín, el fiscal de la causa.
Los detenidos están acusados de asociación ilícita. Para Antín “no son testaferros de Lettieri sino que eran parte de la misma banda”. Diez integrantes del grupo habían sido detenidos el 14 de mayo en un megaoperativo donde se clausuraron 11 desarmaderos con 1200 autos por valor de 8 millones de dólares. En esa ocasión la fiscalía pidió la prisión de Lettieri y Kosariuk, reconocidos empresarios del mundo gastronómico que habían logrado montar una estructura para robar, cortar y vender entre 200 y 300 autos por semana.
Ahora, entre los nuevos detenidos están los gerentes de los locales de Burzaco y Moreno que, además, son yerno y hermanastro de Lettieri. Ellos eran “las segundas líneas de la banda”, dice Antín. “Había una primera línea –explica el fiscal– que eran los jefes: Lettieri y Kosariuk, luego había cuatro gerentes al frente de cada local y a partir de allí, una tercera línea: empleados, los que secuestraban y cortaban autos.” El contador y su mujer completaban el esquema: daban la protección legal desde afuera.
La banda comenzó a operar en la provincia el año pasado, cuando la Justicia detuvo a Elbio Fernández, el poderoso empresario conocido como El Rey del Corte que tenía más de cien galpones valuados en millones de dólares y un socio funcionario de la Fiscalía de Estado de la provincia, un sitio clave que hasta el año pasado centralizaba los remates de autos robados o judicializados. Fuentes de la investigación indican ahora que la banda VIP creció por la herencia de Fernández. De hecho, en los allanamientos de mayo, la Fiscalía secuestró una gran cantidad de Formularios 04 del Registro del Automotor, usados en caso de robo o destrucción de vehículos, que estaban firmados por aquel funcionario de la Fiscalía de Estado, que ahora está detenido.