En una camioneta, utilizada supuestamente para realizar mudanzas, la Policía de Seguridad Aeroportuario (PSA) encontró un cargamento de 400 kilos de cocaína, oculto en un doble fondo. El operativo, anunciado en conferencia de prensa, como parece ser el estilo de la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, se realizó en Lomas de Zamora, donde tiene jurisdicción la PSA. El operativo fue denominado, con la obviedad a la que apelan casi siempre los creativos de las fuerzas de seguridad, se denominó “Mudanza Blanca”.

El hallazgo, que recién se dio a conocer oficialmente ayer, se produjo durante un operativo realizado el domingo pasado. Se hizo saber que en el procedimiento fueron detenidos un hombre de nacionalidad argentino y una mujer nacida en Bolivia.

La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, llamó a una conferencia de prensa que se realizó en una dependencia de la Policía Federal ubicada en Azopardo 620, cerca de la zona portuaria de la ciudad de Buenos Aires. Al presentar la novedad ante los periodistas, Bullrich no escatimó elogios frente al logro obtenido. Dijo que el resultado del operativo es “un éxito del Estado argentino”.

La funcionaria resaltó que se trató de un operativo cuyo resultado “implica sacar (la droga) de la calle, del consumo de nuestros jóvenes”. Afirmó que lo ocurrido significa que “tenemos cuatrocientos kilos, que son nada más y nada menos que cuatrocientas mil dosis (de droga) de altísima calidad, ya preparada para ser distribuida”. Bullrich estuvo acompañada por el secretario de Seguridad, Eugenio Burzaco.

El secretario de Estado estimó que “el valor económico del cargamento es inmenso”, aunque no dio precisiones sobre el monto, a la vez que señaló que la investigación que desembocó en el procedimiento llevó “muchos meses”. Agregó que la organización tiene “otras ramificaciones” que implicarán “más detenciones a futuro”.

Fuentes allegadas a la investigación informaron que luego de varias tareas de inteligencia, los investigadores de la PSA tenía el dato de que se produciría el ingreso al país de un importante cargamento proveniente de Bolivia y que se utilizaría un camioneta “tipo mudancera”. El fin de semana pasado los agentes detectaron el vehículo, una Ford F100 blanca, en el barrio porteño de Liniers, desde donde dispusieron un seguimiento discreto hasta que procedieron a su detención en Lomas de Zamora.

Burzaco dijo que el hombre y la mujer que iban en la camioneta “se comunicaban satelitalmente” con otros integrantes de la banda, pero que en un momento dado “tuvieron una falla en el sistema” y “eso le permitió a la PSA triangular” sus llamados y ubicarlos.

Al revisar el interior del rodado, los expertos hallaron un total de 372 paquetes rectangulares o “ladrillos” de cocaína escondidos en un doble fondo especialmente acondicionado, con un peso total de unos 400 kilos.

Bullrich destacó que los detenidos contaban con “cualidades técnicas” en su operación; señaló que contaban con “ladrillos de cocaína” separados “por colores para su distribución”. Los paquetes estaban cubiertos “en grasa para que los perros no pudieran olfatear la droga”.

La droga fue introducida por la frontera en la provincia de Salta y de allí fue trasladada a la provincia de Buenos Aires. No se descarta la posibilidad de que el destino final fuera Europa.

“Buena parte era para su distribución local y otra para exportación”, dijo Burzaco, en tanto que la ministra manifestó que el objetivo de su gestión será “perseguir los carteles, las bandas criminales” para que la Argentina “no sea un país de exportación ni llegue a nuestra población”.

Interviene en la causa el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal Nº 4, a cargo de Ariel Lijo.