Un supuesto taller mecánico de autos de alta competición fue clausurado porque se comprobó que funcionaba como pantalla de un desarmadero de automóviles. El operativo, a cargo de la División Sustracción de Automotores de la Policía Federal y la Dirección de Desarmaderos del Ministerio de Seguridad de la Nación, se realizó en un local ubicado en Larrazábal 1900, del barrio porteño de Mataderos. En el lugar, la policía secuestró autopartes ilegales y tres autos de carrera (un BMW, un Fiat Uno y un Chevrolet Corsa) con numeraciones adulteradas, entre otras anomalías. El secretario de Seguridad, Eugenio Burzaco, informó que los autos corresponderían a Turismo Internacional, una categoría promocional del automovilismo nacional, clase 2 y Super, “que este fin de semana disputarán la cuarta fecha del torneo en el Autódromo Oscar y Juan Gálvez”. Con una orden de allanamiento firmada por el juez Luis Schelgel, los agentes “ingresaron al taller donde secuestraron más de 140 autopartes, entre ellas 26 puertas, seis cajas de velocidad, cinco bastidores de motor, cuatro capots, 11 espejos retrovisores, 36 ruedas y ocho llantas, así como semiejes y tanques de combustible”. También se hallaron tres autopartes de un Nissan que tenía pedido de secuestro vigente.