SOCIEDAD
Iván el Terrible entró a EE.UU., mató a 18 personas y se extinguió
El huracán ingresó por la costa del Golfo de México. Ahora la amenaza es Jeanne.
El huracán Iván ingresó a Estados Unidos ayer por el sur de Alabama, azotando la costa desde Mobile hasta Pensacola, en Florida, con vientos feroces, lluvias torrenciales, enorme oleaje, y provocando tornados que dejaron al menos 18 muertos, serios daños y miles de personas que se encontraban sin energía eléctrica.
Por lo menos 1200 personas están refugiadas en el estadio Superdome, en Nueva Orleans. El tornado ingresó a la zona como categoría cuatro en la escala de Saffir-Simpson, con vientos de 215 kilómetros por hora, pero finalmente descendió a categoría 1. El presidente estadounidense, George W. Bush, decretó la situación de emergencia de los estados de Alabama, Louisiana, Mississippi y Carolina del Sur.
Por su parte, ayer la tormenta tropical Jeanne se convirtió en huracán categoría uno y avanza por el Atlántico hacia República Dominicana, tras azotar la isla de Puerto Rico, informó el Centro Nacional de Huracanes (CNH) con sede en Miami. En República Dominicana ya está vigente un aviso de huracán para la costa este, norte y sur, y se emitió una vigilancia de meteoro para el norte hasta Monte Cristo, cerca de la frontera con Haití. La República Dominicana recibió desde las primeras horas de ayer fuertes lluvias y vientos. En Puerto Rico, el nuevo huracán dejó al menos dos muertes.
Este nuevo tornado llegará a Florida el martes próximo, con lo que se suma a la seguidilla de huracanes que azota la zona del Caribe desde agosto pasado. Por el océano Pacífico, el huracán Javier, que disminuyó a categoría 3, azotaba ayer por la península Baja California y otras regiones del oeste de México.
En cuento al poderoso ciclón Iván, que dejó al menos 70 muertos en su paso por el Caribe, causó la muerte de 13 personas en Florida y cinco en Louisiana y Mississippi.
Cientos de miles de personas se encontraban sin energía eléctrica en toda la región, donde había árboles arrancados de raíz, semáforos rotos, casas sin techo y escombros. Severas inundaciones bloqueaban numerosas carreteras, incluyendo la Interestatal 10, que une a los estados del sur de este a oeste. Incluso en Gulf Shores, según la cadena CNN, varios cocodrilos andaban sueltos y nadando por los lugares inundados tras escaparse del zoológico de la ciudad.
Iván, uno de los ciclones más poderosos en azotar Estados Unidos desde 1900, ya provocó más de 80 muertos en su letal trayectoria por el Caribe antes de ingresar al Golfo de México.
Un impresionante puente de Pensacola se partió por la mitad. El alcalde local, John Fogg, explicó que un tornado arrancó el techo de un hospital y que el centro cívico, donde mucha gente se había refugiado, también resultó dañado por la tormenta. Casi toda la región también sufría de escasez de combustibles, con las estaciones cerradas o falta de electricidad que no permitía la operación de las bombas en las zonas azotadas por el huracán.
Nueva Orleans, que se erige tres metros por debajo del nivel del mar y es extremadamente vulnerable a tormentas y huracanes, se salvó de la ira de Iván, aunque se reportaron algunas inundaciones en las partes más bajas de Louisiana.
La Casa Blanca anunció que el presidente George W. Bush visitará este fin de semanas las zonas de Florida y Alabama castigadas por Iván.