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La Cámara de Diputados bonaerense convirtió en ley una rebaja en el impuesto inmobiliario urbano baldío que había sido impulsada por el Poder Ejecutivo. La norma establece una baja mayor en los terrenos de mayor valor inmobiliario. Por eso, fue cuestionada por legisladores de la oposición, que consideraron que beneficia a sectores sociales de mayor poder adquisitivo y que disminuye la recaudación fiscal provincial. La ley, sancionada el miércoles último, dispone la modificación de la escala de alícuotas que se cobran sobre el valor fiscal de los terrenos baldíos y comenzará a regir con efecto retroactivo a partir de enero de 2004. Así, los excedentes en los pagos realizados durante este año serán imputados al período 2005. “Luego de la devaluación tuvimos que revaluar los terrenos, que adquirieron un precio muy elevado. Por eso decidimos bajar las alícuotas, para privilegiar el cumplimiento de los pagos”, explicó el subsecretario de Política y Coordinación Fiscal bonaerense, Daniel Lorea.
La norma modifica las alícuotas y reemplaza la tabla de cálculo del impuesto inmobiliario provincial de terrenos baldíos, que antes oscilaba entre valuaciones de 1800 a 80 mil pesos. Ahora la escala va de 6 mil y 300 mil pesos. “Un terreno de 80 mil pesos que antes pagaba una alícuota anual del 19 por ciento, ahora abonará el 14 por ciento”, dijo Lorea.
Algunos legisladores consideraron que la norma beneficia sólo a sectores de mayor poder adquisitivo, como a los dueños de terrenos ubicados dentro de countries. Según los cálculos que realizó el presidente del bloque ARI, Horacio Piemonte, una propiedad de 350 mil pesos antes pagaba 6680 pesos y ahora pagará 4840 pesos, mientras que una propiedad de 6 mil pesos antes pagaba 80 pesos y ahora abonará 74. “Se trata de una rebaja que favorece a terrenos de mayor valuación. Por eso digo que no es equitativa y que en lugar de favorecer a los más pobres, favorece a los que más tienen”, informó Piemonte.
“Con esto se agranda la brecha entre aquellos pocos que tienen mucho y los miles de bonaerenses que han sufrido las consecuencias de este modelo de exclusión aplicado en el país y nuestra provincia. Y encima bajará la recaudación del estado provincial”, señaló el diputado Piemonte.
“Una de las razones por las que se cambiaron las alícuotas es que desde hace un tiempo se vienen revaluando los terrenos. Inclusive muchos terrenos ubicados dentro de countries que estaban valuados por debajo de su precio real. Ahora se adecuaron las valuaciones, pero también las alícuotas. La idea es que haya más personas que paguen y así habrá más recaudación fiscal”, consideró el presidente del bloque del PJ, Juan Gariboto.
La ley también establece la disminución del impuesto a los ingresos brutos para propietarios de frigoríficos. “Nos opusimos a este proyecto impulsado porque no sólo favorece a grandes propietarios de terrenos baldíos, sino también a sectores con mejor nivel contributivo”, apuntó Piemonte.