SOCIEDAD
La ex Casa Cuna estrena una remodelación a nuevo
Las instalaciones inauguradas ayer aumentarán en un 75 por ciento las consultas que pueden ser atendidas en el hospital.
La primera etapa de la remodelación del Hospital de Niños Pedro de Elizalde quedó inaugurada ayer. El tradicional corte de cintas, tras dos años de construcción y refacciones edilicias, dejó el paso abierto a las nuevas salas de los Servicios Centrales, Neonatología e Internación, que abarcan unos 11 mil metros cuadrados de nuevas instalaciones.
Las tareas en el hospital, ubicado en el mismo lugar donde en 1873 se mudó la Casa de Niños Expósitos, Tacuarí y Finochietto, tuvieron su comienzo en septiembre de 2003 y consisten en el equipamiento y la construcción de 15 mil metros cuadrados de edificios nuevos y 8 mil de remodelación, a un costo total de 26 millones de dólares. Las obras son financiadas por el Banco Interamericano de Desarrollo y, a su término, el hospital contará con 74 consultorios, doce laboratorios, ocho salas de imágenes, ocho quirófanos y 254 camas.
Las instalaciones inauguradas ayer aumentarán en un 75 por ciento la cantidad de consultas que pueden ser atendidas en el hospital, en lo que se considera el emprendimiento del área de salud más importante de América latina. Con esas ampliaciones, se resuelve uno de los principales problemas del centro médico: la falta de espacio.
La segunda fase de las obras se iniciará en los próximos días. En esa etapa se edificará un nuevo centro quirúrgico, un auditorio y se hará la remodelación integral de los pabellones Alconero y Jockey Club, en donde se albergarán el servicio de guardia, consultorios externos y servicios administrativos.
Las remodelaciones permitirán la incorporación de un hospital de día, internación por sistema de cuidados progresivos, historias clínicas centralizadas y áreas de investigación y residencia. Una vez finalizado el proyecto, todos los edificios, tanto los nuevos como los ya existentes, quedarán integrados alrededor de una plaza y un parque que ofrecerán espacios verdes para los pacientes y el personal.
El jefe de Gobierno porteño señaló que con las obras “la ciudad está siendo totalmente solidaria y federal”, ya que “solamente 30 por ciento de los que se atienden son de la ciudad de Buenos Aires y el 70 por ciento restante, del conurbano, del resto del país, incluso de países limítrofes”, indicó.
El hospital, centro asistencial de referencia de la población infantil del sur de la ciudad, atiende diariamente a unos dos mil niños, entre los que predominan los pacientes ambulatorios o los que ingresan por la guardia en situación de urgencia. De ellos, sólo el 10 por ciento posee algún tipo de cobertura médica. Durante el primer semestre del año, en el Elizalde se realizaron más de 127 mil consultas externas, se atendieron casi 12 mil urgencias y se llevaron a cabo más de 33 mil cirugías.
Ibarra también aseguró que se trata de “la primera etapa de un proyecto que estará terminado para mediados de 2007” y sostuvo que este tipo de atención a la salud “no las resuelven ni el sector privado ni el mercado, se la está resolviendo entre todos”. Por su parte, Jorge Arslanian, director del hospital, expresó que “es el resultado de muchos años de esfuerzo y trabajo para que los niños accedan a una atención médica de primer nivel”.