Charly García está al borde de la captura recomendada por la Justicia uruguaya, tras haber desoído la citación de los tribunales de Maldonado a raíz de la agresión a un fotógrafo argentino a la salida de un local nocturno de Punta del Este. Charly había sido citado por el tribunal oriental después de golpear en la madrugada del martes 3 al cronista gráfico Carlos Martínez, de la revista Newmen, cuando éste intentó fotografiarlo al salir del boliche Buda Bar con una copa de vino en la mano. En la ocasión, el músico le habría arrojado la copa en el rostro para luego asestarle algunos golpes de puño, rotura de tabique incluida, según comprobaron los médicos que atendieron la nariz de Martínez.

Poco después del incidente Charly volvió a nuestro país, por lo que la situación legal alrededor de la denuncia se complejizó. Al parecer la intención de la fiscalía uruguaya de pedir la captura internacional no obedecería a la gravedad del delito –que es leve–, sino a las declaraciones posteriores, en las que según testigos el músico aseguró que volvería a actuar del mismo modo y que le había “encantado” pegarle al fotógrafo porque había sido “lo mejor que había hecho en la noche”.

La causa se encuentra radicada en el Juzgado de Segundo Turno de Maldonado y está ahora en manos del fiscal Gustavo Zubía, quien deberá colectar las pruebas necesarias para lograr que García se vea en la obligación de presentarse a declarar. Ignacio Irurzun, el abogado de Martínez, y también de famosos como Moria Casán, Miguel Romano y Zulema Yoma, comentó en diálogo con Página/12 que el juzgado ha requerido que se remitieran a la brevedad los videos completos que obtuvieron movileros del programa Intrusos en el espectáculo en la puerta del boliche. En esa grabación quedaría en evidencia la actitud de Charly durante la noche del incidente. “En ese material audiovisual quedó registrado nítidamente el momento de violencia –señaló Irurzun–: se ve cuando le pega y, en una nota posterior, García agrega amenazas en las que le dice al fotógrafo que no se le acerque, hablándole de manera desafiante.” Irurzun agregó que remitirá fotografías en las que se muestra cómo quedó el rostro de Martínez. “Mi cliente se siente dolido no sólo desde el punto de vista físico sino también a nivel humano, ya que el agresor no se ha comunicado con él y tampoco lo ha hecho ningún abogado. Es una actitud de gran soberbia la de este hombre”, remató.

En el caso de que se remitiera el pedido de captura, de todos modos, todo hace pensar que Charly quedará en libertad debido a que se trata de una causa que gira alrededor de un delito excarcelable. Mientras el proceso sigue su curso, García y sus allegados prefirieron hacer mutis por el foro. La excepción ha sido Alan Faena, que acudió ayer a declarar a Maldonado, aunque no lo hizo como testigo sino como propietario de la casa en la que García estaba viviendo cuando ocurrió el hecho.

Informe: Facundo García.