Sol y playa son tal vez dos de las imágenes más asociadas con el nudismo. “El naturismo cada día gana más adeptos”, dicen en Easy Going y por tal motivo la agencia turística tiene un especialista naturista en su plantel, para brindar el asesoramiento. Eduardo Leiro, seguidor del naturismo, enumera algunas opciones: Chihuahua, en Punta del Este; la Reserva Naturista Yatan Rumi, en Tanti (Córdoba), Las Playas Pedras Altas, Galheta, Praia do Pinho, Abricó, Brava (Cabo Frío), Olho de Boi, Massarandupió, Tambaba, todas en Brasil ofrecen posibilidades para la práctica y el disfrute del naturismo en América del Sur. En el Hemisferio Norte, la práctica del naturismo está más extendida y por lo tanto cuenta con mejor infraestructura. Portugal, España, Francia, Italia y Grecia son paraísos naturistas europeos que Easy Going pone a su alcance.

En Argentina ya existen dos playas donde se puede optar por tener esta experiencia. La Escondida, en Mar del Plata, y Playa Querandí, que fue inaugurada el 14 de diciembre pasado en Villa Gesell, cuatro mil metros al sur de Mar Azul, por iniciativa de la Asociación Para Nudismo Naturista Argentina (Apanna). Hay también muchas quintas habilitadas para la práctica, tanto en Buenos Aires como en Córdoba.

En esa línea se enmarca la propuesta de Jorge Aloha: dar un paseo nudista por el Río de la Plata. “Viví en Europa, tengo velero y cuando volví empecé a hacer paseos”, explica Aloha. Un día, una pareja de nudistas le preguntó si podían practicar nudismo en el viaje y el dijo que sí. “Esto es bien naturista, porque es estar en contacto con la naturaleza”, dice. El paseo cuesta 50 pesos por persona, son 5 horas y un mínimo de 4 personas.