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Desde Río de Janeiro

La Cumbre de los Pueblos por la Justicia Social y Ambiental, que se lleva a cabo en Río de Janeiro en forma paralela a la conferencia de Naciones Unidas, emitió también ayer su documento final, fruto de los encuentros y deliberaciones de movimientos sociales, sindicatos y organizaciones ambientales. Una delegación de esas agrupaciones se trasladó al predio de Riocentro para entregar el texto de cinco carillas al secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon.

El texto elaborado por las organizaciones también cuestiona el concepto de “economía verde”, a la que caracteriza como “la expresión de la actual fase financiera del capitalismo, que utiliza también nuevos mecanismos como el superestímulo al consumo, los mercados de carbono y la extranjerización de tierras”.

El documento, al que accedió Página/12, plasma una serie de propuestas y reclamos como “la defensa de los espacios públicos en las ciudades, la economía cooperativa y solidaria como alternativa a la crisis, la soberanía alimentaria, un nuevo paradigma de producción, la distribución del consumo, un cambio en la matriz energética y el fortalecimiento de las economías locales y los derechos territoriales”.

En su introducción, el texto aclara que “sintetiza los principales ejes discutidos en los plenarios y asambleas, así como expresan las intensas movilizaciones ocurridas durante este período y que resumen las convergencias en torno de las causas estructurales y las soluciones propuestas por los pueblos frente a la crisis, así como los principales ejes de lucha para el próximo período”. Y deja en claro que su objetivo “apunta a que los pueblos, movimientos y organizaciones puedan seguir convergiendo y profundizando sus luchas y la construcción de alternativas en sus territorios, regiones, países”.

Y, en el cierre, deja expresas las consignas para las luchas futuras: “Contra la criminalización de las organizaciones y movimientos sociales; contra la violencia contra las mujeres; por el derecho de los pueblos a la tierra y a los territorios urbanos; por la democratización de los medios de comunicación; por la soberanía alimentaria, contra los agrotóxicos y los transgénicos, y por la solidaridad com Paraguay”.