SOCIEDAD
“De eso me enteré en estos días”
Tanto el embajador de la República Dominicana en Argentina, Cirilo Castellanos, como la cónsul Amanda “Chinchina” Cabral negaron en un reportaje con Página/12 tener una relación cercana con la dominicana Máxima Pérez Matos, investigada por la fiscalía Nº 32 por “amenazas de muertes” y “facilitación de la prostitución”. Sin embargo, declaraciones de dominicanas que fueron víctimas de una red de trata de blancas contrastan con sus afirmaciones (ver nota central).
“La conozco de vista porque nosotros invitamos a los dominicanos para el 27 de febrero que es la fecha patria, para una ofrenda floral que hacemos siempre ante la estatua del libertador general San Martín. Aquí le damos participación a la colonia dominicana sea cual fuere la afiliación política y cual que sea la posición social y económica de la persona”, respondió el embajador, en la entrevistada publicada por este diario. “Ella es dominicana, ha recurrido a su embajada, nosotros la hemos recibido siempre como hemos recibido a todos nuestros compatriotas”, contestó la cónsul.
–Varias mujeres han declarado que usted es amiga de la hermana de ella, de Digna –le comentó este diario a Cabral.
–Sí, se ha dicho mucho esto.
–¿Es así?
–A Digna, si la vi tres veces es mucho. Una vez en una reunión que ella estaba con su hermana. Después de eso, hace como dos años, se hizo en casa de otra dominicana una “hora santa” y me invitaron a que participara. La persona que la había organizado me dijo: “Doña Amanda, le tenemos una sorpresa. Nosotros querríamos que usted bautice a un niño que acaba de nacer”. Yo no me voy a negar a bautizar a un bebé.
–¿No siguió viendo al nene y a su mamá?
–No. A esa señora no la volví a ver.
–Lo que dice una denuncia es que la pensión que manejaba Máxima y otra que maneja su hermana Digna eran los lugares adonde llegaban traídas por esta supuesta red.
–Es lo que me he enterado en estos días.