Viernes, 30 de mayo de 2008 | Hoy
19:36 › TENIS - ROLAND GARROS
El sorprendente argentino Eduardo Schwank jugó muy bien pero no pudo con el francés Paul-Henri Mathieu (N.18), que lo derrotó en cuatro sets, 6-2, 6-3, 3-6, 7-6 (11/9), hoy en la tercera ronda del Abierto de tenis de Francia, disputado en el court central de Roland Garros. Schwank era el único argentino que seguía en el torneo.
"Por ahí me sentía un poco nervioso y perdido en los dos primeros sets en un estadio tan grande. Lento de piernas. Me costó dos sets encontrarme, después gané uno y casi el otro. De otra manera me hubiese ido mal, frustrado", dijo Schwank, rosarino, de 22 años, llegado de las "cualis" del torneo.
El último argentino en lista este año en París se había impuesto antes a los españoles Carlos Moyà y Marcel Granollers, en la primera y la segunda ronda, respectivamente.
El encuentro en el court Philippe Chatrier duró tres horas y dos minutos.
El argentino, entrenado por Javier Nalbandian, que no conocía en la cancha a su rival, recién pudo tomarle los puntos en el tercer set, que ganó 6-3, y pelear de igual a igual el cuarto, levantando dos "matchs-points" y llevándolo al "tie-break", donde volvió a hacer lo mismo, sin que el apoyo del público al jugador local lo amilanara.
"Mi bronca es porque si zafaba ese set (el cuarto), en el quinto me iba a sentir más suelto. El no pudo cerrar el partido antes y me queda la pregunta", señaló Schwank.
Respecto a su balance, el jugador fue preciso: "en dos meses me pasaron muchas cosas. Gané en "challenger" y jugué acá tres rondas, lo que me va a venir muy bien para mi carrera. Voy por buen camino y aspiro a terminar el año entre los primeros cuarenta (de la ATP)".
Schwank regresará a Argentina y volverá a Europa para disputar Wimbledon.
Mathieu, por su parte, que jugó sólido en las dos primera mangas, sobre todo con su saque, cediendo poco a su rival, se las verá en octavos de final con con el serbio Novak Djokovic, tercer cabeza de serie del torneo y de la ATP, que derrotó al estadounidense Wayne Odesnik (quien fuera verdugo del argentino Guillermo Cañas en primera ronda) por tres sets a cero, 7-5, 6-4, 6-2, en el court Suzanne Lenglen.
"Fue una hermosa victoria. Jugué a gran nivel en los dos primeros sets. Después, él (Schwank) se relajó y comenzó a jugar bien. Al final no se trataba de jugar bien sino de hacerlo con las tripas. Espero que esto marque una inflexión (en mi carrera)", dijo el francés, que llegó a octavos también en 2002.
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