Viernes, 27 de junio de 2008 | Hoy
19:05 › EN LA CIUDAD DE BUENOS AIRES
Un registro único de denuncias por violaciones a los derechos humanos durante la Guerra de Malvinas se abrió hoy en el ámbito de la Capital Federal, para recolectar y sistematizar las presentaciones con el objetivo de remitirlas al juzgado federal de Río Grande que investiga el tema.
La presentación del registro fue realizada por la Defensora del Pueblo de la Ciudad, Alicia Pierini, y el titular de la comisión de Derechos Humanos de la Legislatura porteña, Juan Cabandié, en la sede de la Defensoría, y participaron también ex combatientes de la guerra de Malvinas.
"Este registro revivirá los testimonios tanto para la historia como para hacer justicia", afirmó Pierini, y precisó que la Defensoría ya viene recibiendo una serie de testimonios que serán sistematizados y enviados a la Justicia.
De esta manera, las denuncias se sumarán a las investigaciones ya iniciadas en otras provincias, con testimonios recogidos en Corrientes, Chaco, Chubut, Santa Cruz y Tierra del Fuego, que coinciden en las torturas y vejámenes a las que fueron sometidos los combatientes durante la guerra por parte de sus superiores.
"Las Fuerzas Armadas argentinas trataron a los jóvenes soldados, en pleno enfrentamiento bélico por las Islas Malvinas, del mismo modo en que procedieron como gobierno dictatorial con los ciudadanos en territorio continental: con cárcel ilegítima, torturas, vejámenes, abuso de poder y muerte", explicó Pierini.
Para Cabandié, en tanto, el registro es "un paso más en pos de la justicia" y remarcó "la responsabilidad de las instituciones de la democracia en la búsqueda de la verdad y la justicia". El legislador señaló, en ese sentido, que los combatientes de Malvinas "también fueron víctimas de la última dictadura militar".
Durante la presentación, expusieron también representantes de los ex combatientes de Malvinas, quienes relataron sus experiencias durante el conflicto bélico. Roberto Lacase contó que "hubo soldados torturados, simulacro de fusilamiento y hasta asesinados por sus propios superiores" y remarcó que "ahora existe seguridad jurídica" para hacer las denuncias.
A su turno, el titular del centro de combatientes de La Plata, Ernesto Alonso, dijo que "estos procesos en los '90 eran imposible hablarlos y denunciarlos" y remarcó el accionar del Estado que "a través de sus instituciones, se está haciendo cargo" de la causa Malvinas.
Finalmente, Pablo Perazzo relató que durante la guerra, al intentar abrir un baúl con comida almacenada, fue baleado por un superior. Las denuncias recolectadas serán enviadas al juzgado federal de Río Grande, que ya viene recibiendo denuncias similares de otras provincias del país.
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