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"Resulta paradójico y en algunos casos hasta ridículo que personas que han fomentado el maltrato de campesinos, la destrucción, quema y asalto de instituciones y el asesinato de gente humilde estén en primera fila desplegando sus oraciones", afirmó, citado por el diario digital Erbol, vinculado a sectores de la Iglesia Católica boliviana.

García Linera dijo que "la jornada de oración encabezada por la Iglesia Católica y los prefectos opositores (Rubén Costas, de Santa Cruz; Mario Cossío, Tarija; Ernesto Suárez, Beni y Savina Cuellar, Chuquisaca), es una acción política de personas que adoran el conflicto y veneran la violencia".

"Hay un pequeño núcleo de una derecha radical, violenta que le prendió fuego al país en agosto (2008), fue derrotada y ahora quiere recuperar fortaleza y apuesta por el No", señaló. "No hay más de dónde elegir (en el referendo), o con los violentos de la derecha fascista o con el cambio en democracia, con el cambio en igualdad y mejoras al país", enfatizó, en declaraciones recogidas por el portal paceño Ultimas Noticias.

Los gobernadores opositores de Bolivia encabezaron ayer un acto a cuya organización contribuyó el arzobispo de Sucre, para manifestar su rechazo a la reforma constitucional que será sometida a referendo el 25 de este mes porque, a juicio de ellos, el texto impulsado por el gobierno "no respeta a la religión católica".

Al acto, que fue organizado por Cuéllar y el arzobispo de Sucre, Jesús Pérez, asistió una hija del prefecto de Pando, Leopoldo Fernández, quien está preso y acusado de haber sido responsable de la muerte de al menos 20 campesinos en una masacre que ocurrió el 11 de septiembre pasado.

De la manifestación, convocada bajo la forma de un "Día de oración por Bolivia", participaron unas 3.000 personas, según una estimación de la televisora local ATB citada por la agencia noticiosa alemana DPA.

"Hemos orado para que vengan mejores días para nuestro país y que digamos 'No' (en el referendo) porque el texto del MAS (el Movimiento al Socialismo, partido gobernante) no respeta a la religión católica", declaró Costas. "Nos reunimos por una cuestión de conciencia y para encontrarnos con nuestros principios y valores cristianos", señaló Cossío.

Los cuatro prefectos que se reunieron ayer en Sucre son los mismos que faltaron el lunes en La Paz al encuentro convocado por el presidente Evo Morales con el propósito de acordar los mecanismos para poner en marcha las autonomías que reclaman las regiones.