Martes, 18 de enero de 2011 | Hoy
21:32 › SERá MáS GRANDE QUE LA EX BOTNIA
El consorcio Montes del Plata, que conforman capitales sueco-finlandeses y chilenos, anunció que en mayo iniciará la construcción de su planta de celulosa, que volcará sus efluentes en el Río de la Plata. Integrantes de la Asamblea de Gualeguaychú adelantaron que no realizarán acciones, pero criticaron al presidente uruguayo, José Mujica, y la "complacencia" del gobierno nacional. El canciller Héctor Timerman había indicado que el proyecto cumple con el Tratado del Río de La Plata.
La nueva papelera, más grande que la levantada por la finlandesa Botnia en Fray Bentos, hoy UPM, se comenzará a construir en mayo próximo en Punta Pereyra, al norte del departamento de Colonia, algo más de 200 kilómetros al noroeste de Montevideo, y se estima que comience a producir en el primer trimestre de 2013.
Así lo anunciaron en la sede del Gobierno uruguayo, los máximos directivos del consorcio empresario, Jouko Karvinen, CEO de Stora Enso y su par de Arauco, Matías Domeyko, arribados a Montevideo para la ocasión, junto al gerente general de Montes del Plata, Erwin Kaufmann.
El emprendimiento será "la mayor inversión privada en la historia de Uruguay", agregó Montes del Plata, que compró el proyecto y terrenos a la española Ence por 340 millones de dólares. Según los documentos presentados en abril del año pasado por el consorcio, la planta tendría una capacidad de producción inicial de 1,5 millones de toneladas anuales de pasta de celulosa.
La fibra de eucalyptus para abastecer la fábrica provendrá en su mayoría de las propias plantaciones forestales de la empresa en nueve departamentos del país vecino.
Los ambientalistas José Pouler y Jorge Fritzler, si bien manifestaron su rechazo por considerarla "contaminante" del medio ambiente, desestimaron futuras acciones porque "tiene que reaccionar la gente de Colonia firmemente ante las papeleras contaminantes". Según Pouler, los ambientalistas uruguayos ya se están expresando porque se están cayendo las caretas de la administración del país vecino.
La Asamblea de Gualeguaychú advirtió días atrás que la nueva pastera pondrá en riesgo la salud de "la mitad de la población de Argentina" y acusó al canciller Timerman de "no saber leer", ya que la nueva planta violaría el "articulado" del Tratado del Río de la Plata.
Días pasados, el canciller Héctor Timerman había ratificado que Argentina no cuestionará la construcción de la nueva fábrica en un río fronterizo, al asegurar que "de ninguna manera" el gobierno nacional va a "impedir el desarrollo" en Uruguay de esa papelera.
Timerman había indicado entonces que el emprendimiento que se llevará a cabo en el departamento de Colonia "cumple estrictamente con el Tratado del Río de la Plata" y que Uruguay, "en su momento", informará a la Argentina sobre el avance de la iniciativa.
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