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La iniciativa del PRO generó divisiones en el seno del Peronismo Federal, donde el ex presidente Eduardo Duhalde rechazó la alternativa, mientras que el diputado Felipe Solá habló de una posibilidad "válida". Aunque Macri reiteró hoy que ocupará el lugar que le asignen si se produce la alianza que ayer proclamó a través de una conferencia de prensa negó que su postulación sea "un obstáculo": "Yo trabajo para mi candidatura presidencial pero no soy un obstáculo para ningún tipo de acuerdo. Yo iré en el lugar que me toque, si se produjese un gran acuerdo".

El ex presidente duhalde, por su parte, aclaró que "durante más de dos años trabajé con Rodolfo Terragno, la UCR, el socialismo, el GEN e incluso el oficialismo, para perfilar políticas de Estado. En diciembre del año pasado firmamos un acta acuerdo con todos y ahora debemos avanzar, pero no conviene hacerlo públicamente porque hay que hacer una sintonía fina de estos programas".

En cambio, Solá consideró como "válida" la convocatoria de Macri y se mostró "dispuesto a discutir propuestas" con otros dirigentes de la oposición. "Lo mejor hubiera sido que antes de hacer una convocatoria a través de la prensa se hubiera llamado a los líderes de la oposición, pero no por eso la propuesta debe ser rechazada", sostuvo Solá. Destacó, además, que "se propone trabajar sobre temas concretos, y estoy dispuesto a hacerlo, agregando algunas cosas que faltan. Pongámonos a discutir ya", afirmó.

Por su parte, el jefe del bloque de senadores radicales, Gerardo Morales, afirmó que "esas convocatorias no se hacen por los medios", y agregó que si se trata de acordar políticas públicas habría que ampliar la convocatoria al "partido de gobierno". En la UCR, la idea de Macri solo despertó cierto entusiasmo en el ex precandidato presidencial Ernesto Sanz y en el vicepresidente, Julio Cobos, mientras el proclamado candidato presidencial del partido, Ricardo Alfonsín, mostró sus diferencias.

Cobos opinó que "tenemos la oportunidad de construir un país a largo plazo. La agenda de temas propuestos debe ser abierta y contemplar los diferentes aportes". Sanz, a su turno, sostuvo que su propuesta "no es hablar ahora de acuerdos electorales, sino sobre los problemas de nuestro país. Hagámoslo abiertamente a la vista de todos". Alfonsín, en cambio, rechazó de plano el convite del jefe del PRO, al señalar que "es un despropósito pensar que la lista de temas generales que sugiere Macri se trata de una propuesta programática en serio". Aclaró, además, que con Macri "tenemos visiones contrarias, la mayoría de ellos tiene una mirada reivindicativa de la década del ´90".

El gobernador de Santa Fe, el socialista Hermes Binner, coincidió con "la necesidad de buscar acuerdos programáticos" pero aclaró que con el PRO y el Peronismo Federal "hay un límite teórico y práctico". Desde Proyecto Sur, el candidato a jefe de Gobierno porteño, Claudio Lozano, afirmó en diálogo con Télam que "no tenemos ningún tipo de coincidencias con Macri en torno a la pobreza, al trabajo y al proyecto de país". Y aseguró que "no va a haber un frente único de toda la oposición".