Axel Kicillof, propuesto por el Gobierno para ocupar un sillón en el directorio del Grupo Techint en reemplazo del economista Aldo Ferrer, opinó: "Para mí fue completamente inesperada la actitud de la empresa", debido a la "enorme resistencia que puso", y por ello le pidió "una actitud más razonable".

Para Kicillof, "hoy no se entiende bien cuál es el problema", pero le parece que esto sería "sencillo de resolver teniendo en cuenta que hay un accionista minotario que es el Estado, que tiene derecho a tener un representante en el directorio".

"Esto no es ni más ni menos que poner un director con atribuciones legales. No se plantea vulnerar el derecho del directorio ni nada por el estilo", aclaró durante una entrevista racial, en la que consideró que la discusión está inmersa en un "proceso histórico paulatino donde el Estado empieza a recuperar lo que había perdido", como lo hizo con las AFJP respecto del "patrimonio de los jubilados".

Además, mencionó que "en la mayoría de las empresas donde el Estado heredó una participación accionaria no hubo ningún problema para designar un director, como Telecom, o Aluar".