El respeto por las decisiones económicas de cada país le resultó a Boudou "una novedad" que se está "haciendo costumbre" en ese tipo de reuniones y que "contrasta con las ideas del FMI, que siempre tenía políticas como si todos los países tuvieran que llevar adelante las mismas medidas aun en situaciones muy distintas".

Durante una conferencia al finalizar las conversaciones entre países, el funcionario recordó que había propuestas impulsadas por Francia para regular los precios de los commodities a las que "nos opusimos oportunamente, y (ahora) hemos logrado que ahora ni siquiera apareciera en la declaración" final, que será la base para la cumbre de presidentes de Cannes en noviembre.

El ministro argentino dio a conocer, también, que entre lo temas debatidos en los encuentro de ayer y hoy en París estuvo la cuestión de los paraísos fiscales. "El G-20 los sigue presionando" y por ello "se espera que se tomen medidas en la cumbre de noviembre". Ahora "se habla por separado de paraísos fiscales y de jurisdicciones no cooperativas, y esto es un logro", añadió.

Asimismo, recalcó como meritoria la situación argentina, sobre todo cuando arrecian los debates sobre la posibilidad de que la economía mundial entre en una nueva recesión como en 2008-2009. En su criterio, el país "lleva ocho años de trabajo ininterrumpidos para fomentar el mercado interno y equilibrar sus exportaciones, algo que nos coloca en una situación de menor vulnerabilidad".

Sin embargo, agregó, esto "no quita que estemos prestando mucha atención a este proceso y que estemos en contacto con Brasil y China, para que ambas relaciones comerciales se mantengan en el futuro", concluyó Boudou.