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Entre los automóviles que continuarán siendo peritados en búsqueda de ADN o rastros de sangre está el del padre de su actual pareja, María Inés Márquez, Carlos, que es de características similares al vehículo gris que algunos testigos dijeron haber visto el martes cerca de la escuela donde desapareció el niño.

Asimismo, las fuentes señalaron que el fiscal tiene previsto citar a testigos cercanos a Cuello para continuar con el diseño de las pistas en torno a los últimos movimientos del imputado el martes.

Cuello aseguró ayer al ser interrogado por el fiscal Javier Ochoaizpuro que no tuvo participación en el crimen mediante una frase escalofriante: "Yo lo odiaba, pero no lo mate", por lo que sigue en el centro de la sospechas de los investigadores imputado como supuesto autor de "homicidio agravado".

Por su parte, el presidente del Foro de Seguridad de Junín, Osvaldo Giapor, señaló que esa comunidad donde se instruye la causa por el crimen se encontraba conmocionada y señaló que el caso "no tiene parangón, no tiene forma de explicarse".

"Este tipo tiene un problema mental y la gente lo quería linchar", señaló Giapor al referirse al traslado de Cuello a la vecina ciudad tras su detención. El presidente del Foro de Seguridad indicó que "como uno está dentro de la Justicia tiene que decir que no debemos tomar justicia por mano propia, pero para que la gente no reaccione la Justicia tiene que actuar rápido".

En Lincoln, la ciudad donde vivía el nene con su madre Susana Leonor Santillán, las actividades culturales, deportivas y sociales seguían suspendidas a raíz del luto por tres días que decretó el viernes el intendente Jorge Fernández. El jefe comunal dispuso el luto y cese de actividades de naturaleza recreativa y festiva en la comuna a raíz del "sentimiento de dolor popular" que generó el crimen.