En Siria, los cuatro ataques cayeron cerca del enclave kurdo de Kobani y dañaron cuatro posiciones de combate de los extremistas, así como uno de sus edificios en esa zona fronteriza con Turquía, según precisó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.

Por otro lado, en Irak un ataque cerca de Faluya y otro en los alrededores de Baiji golpearon a dos pequeñas unidades del EI, detalló el informe del Mando Central de Estados Unidos (Centcom). Un ataque cerca de Al Qaim destruyó un puesto de control y un vehículo de los radicales, y otro al norte de la ciudad de Tikrit derribó tres edificios ocupados por el EI.

En tanto, los jihadistas decapitaron a tres hombres en distintos pueblos del este de la provincia siria de Deir al Zur (noreste). Uno de ellos fue ejecutado en Al Bulán por supuestamente animar a su hijo a trabajar para la policía del régimen sirio y fue juzgado por "apostasía" por los extremistas.

Los otros dos hombres fueron decapitados y crucificados en plazas de las localidades de Al Ashara y Al Mayadin. Uno de ellos, sobrino de un dirigente de una brigada islamista, fue asesinado por los radicales por presuntamente combatir al EI y por guardar armas en su casa.