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Carrió protagonizó la negativa más estridente al calificar la "mesa política" de Blumberg como parte de "un engaño que monta el poder", mientras que el lavagnismo mantuvo su silenciosa distancia.

Aunque recién en marzo definirá si se presenta como candidato, el padre de Axel Blumberg se reunió ayer con el diputado de PRO Mauricio Macri y adelantó sus intenciones de agrupar a diversos referentes de la oposición en un mismo espacio, una idea que fue planteada en varias oportunidades pero nunca se pudo llevar a la práctica.

Blumberg convocó a dirigentes identificados con la centroderecha como Jorge Sobisch y Ricardo López Murphy; a la titular del ARI, Elisa Carrió y al ex ministro Roberto Lavagna.

A esa convocatoria inicial, el ingeniero sumó hoy a los "gobernadores que están abandonando su gobierno porque se terminó su período" y a Telerman, quien sin el apoyo del oficialismo competirá por un nuevo mandato en la ciudad.

Sin embargo, en el entorno del jefe de Gobierno porteño adelantaron hoy que "están en otro espectro y políticamente en otro lugar" en relación con Blumberg. Por lo tanto, la propuesta tampoco tiene muchas chances de prosperar en el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.

"Esto está siendo organizado desde el poder, porque el diagrama del Gobierno es mostrar un partido de centroizquierda frente a una oposición de derecha", advirtió Carrió, quien se encuentra de gira por la costa bonaerense.

En la misma línea, el jefe de la bancada de diputados del ARI, Eduardo Macaluse, dijo que "desde el gobierno se alienta la articulación de una oposición de derecha".

Menos tajante, desde el radicalismo también rechazaron el convite y se mostraron distantes frente a un eventual diálogo con Blumberg.

El presidente de la Convención nacional, Adolfo Stubrin, comentó que "hay ciertas coincidencias con él en cuanto a la gravedad de la situación de inseguridad en la provincias pero hay discrepancias en el modo de abordar las políticas públicas", aunque aclaró que hasta ahora la UCR no recibió ninguna invitación.

Por su parte, el ex diputado Jesús Rodríguez señaló a Radio América que "hay pocas coincidencias que puedan pensarse en tener ese punto de vista similar" con Blumberg.

En cambio, la propuesta tuvo mejor recepción en la presidenta de Unión por Todos, Patricia Bullrich, quien consideró que "la convocatoria merece ser atendida, porque si algo necesitamos en la Argentina, en la dirigencia política, en la dirigencia social o empresarial, es el diálogo".

El legislador bonaerense Jorge Macri también alentó la conformación de una mesa de diálogo opositora y, en una elíptica alusión al lavagnismo, consideró que es "una buena noticia" que Blumberg "intente hacer lo que nosotros ya intentamos hacer y no nos salió, o no nos dejaron hacer".

Blumberg también reiteró, al hablar por radio Continental, que el convite incluye a "gente del Gobierno" de Néstor Kirchner, aunque en principio la iniciativa reunirá a dirigentes opositores como Mauricio Macri, Ricardo López Murphy, Jorge Sobisch y, eventualmente, a Roberto Lavagna.

"Yo no dije que voy a ser un candidato seguro, yo lo que estoy en este momento es hablando, tratando de juntar a la gente que está con aspiraciones políticas y con programas para sentarnos en una mesa y lograr políticas de Estado", explicó.

Dijo que las prioridades serán "la seguridad, la inclusión social" y, en tercer término, el problema de la energía, además de otros temas como la educación y la salud.

Cuando se le preguntó si incluiría a organizaciones sociales, Blumberg explicó que "si uno lo hace demasiado grande esto, no vamos a llegar a nada" y señaló que es para "la gente que de alguna manera está haciendo política y quiere ocupar puestos en el Gobierno".

Fuente: DyN