El brasileño, Jean Charles de Menezes, de 27 años, fue muerto de siete tiros en la cabeza efectuados desde corta distancia por dos oficiales de policía en la estación de subte de Stockwell el 22 de julio de 2005, 15 días después de que atacantes suicidas mataron a 52 personas en tres subtes y un colectivo de Londres.

Se espera que la Policía Metropolitana de Londres se declare no culpable de los cargos de violación de las leyes de salud y seguridad presentados por los fiscales en este caso en particular.

Terminado este juicio, está previsto que se abra otro proceso específicamente por la muerte del joven brasileño.

El abogado de la Policía reiteró hoy ante los jueces que los oficiales mataron a Menezes porque lo confundieron con un fundamentalista islámico que parecía preparado para cometer otro atentado suicida como los del 7-J.

El brasileño fue asesinado un día después de que cinco atacantes intentaron, aunque sin éxito, detonar explosivos ocultos en mochilas en el sistema de transporte de Londres.

La fiscal Clare Montgomery dijo que la muerte "no fue resultado de una operación de rápido desarrollo que de repente e imprevistamente salió mal".

"Fue resultado de errores fundamentales para llevar a cabo una operación programada de una manera segura y razonable", agregó la fical, citada por la cadena de noticias británica BBC.

La Fiscalía quiere saber por qué, si es cierto que la policía seguía a Menezes desde hacía tiempo y lo consideraba una amenaza, lo dejó salir de su casa, tomar un colectivo y entrar a un subte, todos lugares públicos, en lugar de detenerlo antes.

Luego de que una comisión independiente especial que investiga quejas sobre el accionar policial emitió un informe sobre las circunstancias que rodearon el hecho, la Fiscalía General de la Corona decidió no enujuiciar a ningún oficial en particular.

Pero sí se resolvió someter a proceso a toda la fuerza por considerar que no tomó los recaudos necesarios para no poner en riesgo al público en general y a Menezes durante un operativo de vigilancia, persecución y arresto de un potencial atacante.

La pena contemplada por una condena de violación de las leyes de seguridad y salud es una multa sin límite máximo.

Fuente: Télam